Traductor

31 January 2011

Para estudiar es mejor hacer tests que repasar


El tiempo que los estudiantes invierten en releer o revisar sus notas y material de enseñanza para aprender estaría mejor invertido en hacer tests periódicamente, según un experimento reciente. Los estudiantes que leyeron un texto sobre un tema científico y luego se hicieron una prueba para recuperar de la memoria lo que habían leído recordaron una semana después un 50% más que los que utilizaron cualquiera de otros dos métodos distintos.
En dos estudios distintos, participó un total de 200 estudiantes. Se utilizaron tres métodos: la lectura simple o repetida de un texto, la lectura con el complemento de elaborar mapas de concepto (un método de codificación que consiste en hacer diagramas de las conexiones de lo que se estudia) y la lectura y posterior práctica de la recuperación de los conceptos estudiados. Esto último consistió en que, sin el texto delante, los estudiantes escribieron lo que recordaban de este de forma libre en 10 minutos. A la semana se les hizo a todos un corto test para comprobar lo que recordaban.
Los dos primeros métodos son muy populares y hacen creer a los estudiantes que aprenden mejor de lo que lo hacen en realidad, creen estos expertos. "Cuando los estudiantes tienen el material delante, creen que lo conocen mejor de lo que lo conocen de verdad", explica Jeffrey Karpicke, psicólogo de la Universidad Purdue (EE UU), que ha dirigido el trabajo, publicado en la revista Science. "Muchos estudiantes no se dan cuenta de que guardar el material y practicar el recuerdo es una estrategia de estudio muy potente".
"Este trabajo es interesante en la medida en que revela que mucha riqueza en la adquisición de información no es algo necesariamente positivo, aunque estuvo de moda en educación. De hecho, centrarse en cómo recordar la información relevante parece claramente mejor para afianzar el aprendizaje, al menos a medio plazo", opina Roberto Colom, catedrático de Psicología de la Universidad Autónoma de Madrid. Sin embargo, este experto encuentra un problema en este trabajo: "El test de conocimientos se produce con una semana de separación del evento de aprendizaje, por lo que se abre la posibilidad de que a más largo plazo los efectos de los métodos utilizados se inviertan, algo que puede ocurrir fácilmente".
Karpicke reconoce que el estudio elaborado (con codificación) es bueno para aprender, pero cree que la recuperación es aún mejor. Sin embargo, reconoce que están viendo la forma de combinar ambos métodos.
Colom cree que sería lo mejor, porque "contraponer los procesos de codificación y de recuperación es bastante poco inteligente". "Sería mucho más relevante probar el efecto combinado de ambos", dice.


*Publicado en "El Pais"

Las campañas reducen a la mitad el número de fumadores en 30 años

La incidencia del cáncer de pulmón en Europa Occidental está en retroceso entre los hombres. El origen de estos tumores está en el 85% o 90% de los casos en el tabaco, por lo que esta tendencia solo tiene una explicación: el descenso del tabaquismo. Décadas de campañas de concienciación sobre los peligros para la salud de los fumadores han conseguido contener la epidemia de cáncer de pulmón masculina, que alcanzó su pico de mortalidad en la UE en 1988 (casi una década después en España). Ello demuestra que "la estrategia clásica contra el tabaquismo ha funcionado", a juicio de Josep Maria Borràs, coordinador científico de la estrategia contra el cáncer del Sistema Nacional de Salud.

-Las jóvenes son más adictas a la nicotina que sus coetáneos
Entre los hombres, se ha pasado de un 62,3% de fumadores en 1978 a un 35,3% en 2007, una evolución que ha tenido un impacto directo (aunque lento) en el descenso de este tipo de tumores. Y tratándose de cáncer de pulmón, una caída de la incidencia es clave en la letalidad, ya que la supervivencia de los pacientes a los cinco años es inferior al 15%.
El proceso de la carcinogénesis es lento, "tanto para lo bueno como para lo malo", destaca Borràs. Transcurren dos o tres décadas desde que una persona adquiere el hábito de fumar hasta que aparece el tumor. Y "hasta que no pasan 15 o 20 años de dejarlo no se iguala el riesgo con quien nunca ha fumado", afirma. En las enfermedades cardiovasculares o respiratorias el efecto es mucho más rápido.
El descenso del cáncer de pulmón entre los españoles, que comenzó hacia 2000, es el premio de décadas de concienciación, aunque "un 35% de fumadores aún es una tasa alta", dice Borràs.En las mujeres, la tendencia es opuesta. Comenzaron a fumar más tarde, y están replicando la curva epidémica (de momento en la etapa ascendente) de los hombres. Un 23,9% de mujeres españolas fumaba en 2007 frente a un 17,6% en 1978. Y lo peor: entre los 16 y los 24 años están enganchadas a la nicotina el 32,7%, por un 31,1% de los hombres.
Borràs plantea que las estrategias de concienciación no funcionan igual en hombres y mujeres. En ello abunda Carlos Camps, del Grupo Español de Cáncer de Pulmón. "La modificación de actitudes no puede ser la misma en hombres que en mujeres, que se sumaron al hábito bajo un pseudoespíritu de modernidad e integración sociolaboral".
A pesar de que la incidencia del cáncer de pulmón aumenta entre las españolas (de 12 a 17 casos por 100.000 mujeres entre 2006 y 2012, según un estudio de 2010 de Annals of Oncology), Borràs recuerda que parte de niveles bajos. Por cada ocho tumores de este tipo en hombres hay dos en mujeres. El descenso previsto entre los pacientes masculinos es de 78 a 70 de 2006 a 2012.
Con datos de 2008, la Organización Mundial de la Salud sitúa a España en la posición 32 en incidencia de cáncer. "Estamos muy bien", indica el presidente de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), Emilio Alba. En los primeros puestos están Dinamarca, Irlanda, Australia, Nueva Zelanda y Bélgica, todos ellos países desarrollados. Es lógico. "La mitad de los tumores aparecen a partir de los 65 años" comenta Borràs, de ahí que en los países con esperanza de vida más alta haya más casos. En la situación de España también influyen los buenos hábitos alimenticios. "Los anglos que comen fatal", apunta el presidente de la SEOM.

**Publicado en "El Pais"

Una disfunción cerebral complica la conducción a las personas mayores


Un debate típico, habitualmete en el ámbito familiar, es el centrado en la seguridad que ofrecen las personas mayores al volante. ¿Siguen estando capacitadas para conducir? ¿Son un peligro en la carretera? ¿Cuántos accidentes desencadenan sus despistes? Aunque en esto, como en todo, nada es del todo blanco ni negro, sí que existen algunas evidencias. Una investigación de la Universidad de Rochester, publicada esta semana en la reconocida revista 'Journal of Neurosciencie' concluye que con la edad se produce una disfunción en el área temporal media del cerebro que altera la percepción de los objetos en movimiento. Esta disfunción de la realidad es del calibre de las que experimentan los pacientes con depresión y esquizofrenia.
Los mayores figuran como los automovilistas que menos accidentes tienen. Un reciente informe de la Fundación Mapfre los califica de prudentes y responsables, conocedores de las normas de circulación y como personas conscientes de que sus capacidades se han mermado con la edad. Ni ven ni tienen los mismos reflejos que antes.
Poseen, por tanto, todas las características para convertirse en el sector diana de las aseguradoras. Más seguridad, menos accidentes, más beneficios. Pero, por contra, este colectivo, el de los mayores de 65 años, es el que porcentualmente tiene mayor número de accidentes por kilómetro recorrido.


-Investigación
La explicación a este fenómeno podría estar en la investigación realizada por el Departamento de Ciencias Cognitivas y del Cerebro dek Centro para las Ciencias Visuales de Rochester, que 'Diario Médico' recogía en su edición de ayer. Ciclistas, peatones y coches comienzan a verse de forma diferente cuando se comienza a envejecer. Las personas del fondo se ven entonces mejor que las situadas en primer plano; y esto es así, según se sabe ahora, no porque se pierda capacidad para centrarse en los objetos de delante, sino porque con la edad se gana habilidad para fijarse en los detalles de atrás.


**Publicado en "Vocento"

La piorrea eleva entre el 25% y un 50% el riesgo de enfermedad cardiaca


Dientes sanos; corazón y pulmones, sanos. Esta semana, las evidencias científicas sobre las consecuencias de una mala higiene bucal en la salud cardiaca y pulmonar se han acumulado.
Mientras que las sociedades españolas de Cardiología (SEC) y Periodoncia(SEPA)han presentado un manual sobre la relación entre la enfermedad periodontal y la cardiaca; la revista 'Journal of Periodontology'ha sacado a la luz una nueva investigación que constata un mayor riesgo de neumonía y exacerbación de la enfermedad pulmonar crónica obstructiva (EPOC) en aquéllos con una mala salud bucodental: piorrea, gingivitis, placa bacteriana...
"Los pacientes que presentan algún tipo de enfermedad de las encías tienen entre un 25% y un 50% de riesgo de sufrir un infarto o un ictus o insuficiencia cardiaca", detalla el manual.
Asimismo, y tal como reconocen Nikhil Sharma y H. Shaumsuddin, del Centro de Estudios Dentales en Ghaziabad y del Dental College Hospital en Calcuta (ambos en la india), "las personas con enfermedad periodontal tienen más probabilidades de padecer neumonía, bronquitis o enfisema ".
La literatura científica "establece que la infección periodontal es un factor de riesgo probable para diversas enfermedades sistémicas, incluyendo la pulmonar. Las infecciones respiratorias, tales como la neumonía y la exacerbación de la EPOC implican la aspiración de las bacteriasen las vías respiratorias inferiores. Se ha sugerido que la placa dental puede servir como reservorio de patógenos respiratorios, especialmente en pacientes de alto riesgo con pobre higiene oral", introducen los investigadores indios.
En su estudio han participado 100 personas ingresadas por enfermedades respiratorias que fueron comparadas con otras tantas sanas, de las mismas edades, nivel educativo y lugar de residencia. "La edad media de los enfermos era de 20 a 60 años y todos poseían como mínimo 20 piezas dentales naturales. Además, tenían que llevar hospitalizados al menos tres días por alguna enfermedad respiratoria".
A todos ellos se les sometió a un examen bucodental. "Comparados con el grupo control, aquéllos con enfermedades respiratorias tenían un riesgo significativamente elevado de sufrir piorrea o gingivitis. Lo que sí hemos observado es que aquéllos de niveles socioeconómicos más bajos poseían cuatro veces más posibilidades de tener periodontitis en comparación con los mejor posicionados económicamente. Lo mismo sucedía con las personas que fumaban", asevera el estudio.
"Estos resultados, así como los obtenidos en varios estudios recientes, sugieren que la acumulación de placa supragingival y/o bolsas periodontales favorecen la colonización de patógenos respiratorios y hacen más propensos a los sujetos a contraer una enfermedad respiratoria", agregan.
Los dentistas y "especialmente los periodoncistas, puede desempeñar un papel importante en la prevención de enfermedades respiratorias si redoblan sus esfuerzos para prevenir y detener la progresión de la periodontitis en los pacientes ya afectados. Además, deben mostrar a los pacientes los riesgos asociados a la piorrea". Donald Clenn, presidente de la Academia Americana de Perdiodontología indica que "las enfermedades pulmonares pueden ser gravemente incapacitantes y debilitantes. Al acudir al dentista, en realidad podría estar previniendo o disminuyendo la progresión de enfermedades nocivas, como la neumonía o la EPOC. Este estudio proporciona un ejemplo más de cómo la salud periodontal juega un papel en el mantenimiento de otros sistemas del cuerpo".


**Publicado en "El Mundo"

Celiaca y Crohn, dos patologías 'hermanas'

Desde hace tiempo se sabe que las personas celiacas tienen un riego más alto de desarrollar enfermedad de Crohn. Este vínculo hacía pensar en la existencia de una estrecha relación genética entre estas enfermedades intestinales, en un nexo de unión; sin embargo, hasta la fecha, no se conocía a fondo este origen común.
Una investigación acaba de avanzar en este camino al identificar cuatro zonas en el ADN relacionadas con la aparición de ambos trastornos. En concreto se trata de los lugares cromosómicos PTPN2, IL18RAP, TAGAP y PUS10.
Tanto la enfermedad celiaca como la de Crohn son trastornos inflamatorios crónicos intestinales. La primera es mucho más común entre la población -se estima que una de cada diez personas la padece- y consiste en una intolerancia permanente al gluten, una proteína presente en cereales como el trigo, la cebada o el triticale.
La segunda, en cambio, es menos habitual y se cree que se produce por una reacción autoinmune a determinadas bacterias intestinales.
En ambos casos, el desarrollo de la enfermedad depende tanto de la existencia de una predisposición genética como de la intervención de determinados factores externos.

-La investigación
Para averiguar el nexo de unión entre ambas enfermedades, los autores de esta investigación realizaron una revisión de varios rastreos genéticos previos. En todos los casos, el análisis del ADN se había llevado a cabo con el objetivo de hallar mutaciones relacionadas con la enfermedad de Crohn o la celiaca.
Con los resultados en la mano, estos investigadores replicaron los datos en otras dos muestras independientes de pacientes, lo que puso de manifiesto la existencia de un total de cuatro zonas genéticas que estaban directamente implicadas con los citados trastornos. Dos de ellas ya habían sido sugeridas en estudios anteriores sobre las enfermedades inflamatorias; sin embargo, la otra mitad era completamente nueva en este campo de estudio.
Aunque reclaman más estudios al respecto antes de sacar conclusiones definitivas, los investigadores aseguran en las páginas de ‘PLoS Genetics’ que su trabajo confirma que la enfermedad celiaca y la de Crohn al menos comparten una parte de su origen genético.

**Publicado en "El Mundo"

El pediatra Carlos González desmonta con argumentos las tesis 'antivacunas'


Dar el pecho a los hijos, cogerles mucho en brazos, 'abusar' de los besos y procurarles una crianza natural no está reñido con vacunarles. Ésa es la idea que defiende Carlos González, el pediatra autor de varios 'best sellers' como 'Bésame mucho' y defensor a ultranza de la lactancia materna, que tiene nueva obra en las librerías: 'En defensa de las vacunas'.
Y cómo él mismo bromea, "antes de salir, y sin habérselo leído, ya había gente convencida de que estaba mal". Fueron los propios padres que llegan a su consulta buscando al 'pope de la crianza natural' los que le convencieron que era necesario escribir algo así: "Porque cada vez me encontraba con más gente que no vacuna a sus hijos, engañados con mentiras y falsos argumentos".
Al final, reconoce, los grupos antivacunación profesan "una especie de religión", contraria a cualquier inmunización, sin atender a ningún argumento. "Mucha gente convencida de la lactancia y la crianza natural cree que no vacunarles está también en el paquete. Al contrario, si le quieres tanto, ¿porqué no le vas a proteger de infecciones?". Claro que las vacunas son algo artificial, bromea con su habitual ironía, "igual que los flanes, los zapatos o las camisetas, pero es que la crianza natural no significa no usar nada artificial".

Claro que las presiones y la actuación de la industria a lo largo de la historia no han ayudado a la hora de despejar dudas sobre las vacunas, "pero el hecho de que alguien intente ganar dinero con su producto, no significa que éste no sea bueno". Además, recuerda, las compañías sólo ganan dinero con las vacunas nuevas, "las viejas son demasiado baratas". Un ejemplo, la vacuna del papilomavirus (que tanta polémica sembró) cuesta casi 400 euros, equivalentes a todas las demás inmunizaciones del calendario vacunal juntas.
González tampoco se corta a la hora de valorar ejemplos concretos, como la mencionada del papilomavirus o la de la gripe A. "Cuándo el gobierno salió diciendo que sólo iba a vacunar a grupos de riesgo, enseguida salieron colectivos como los maestros, los taxistas, los barrenderos, diciendo que ellos también quierían estar protegidos". Él mismo, confiesa, se vacunó como muestra de responsabilidad por su profesión, pediatra en contacto constante con mujeres embarazasas y recién nacidos.
"¿Cuántas vacunas se ha puesto usted en el último año?", pregunta a su interlocutora. "La mayoría de la gente lleva al menos 10 años sin vacunarse. En cambio, ¿cuántas cremas faciales se ha comprado en el último años? En muchos sentidos es mejor negocio fabricar cremas o pasta de dientes que hacer vacunas", concluye.


**Publicado en "El Mundo"

La pastilla para prevenir el VIH no es la panacea

En noviembre, un trabajo publicado en la prestigiosa revista 'The New England Journal of Medicine' confirmaba la efectividad del antirretroviral Truvada para prevenir la infección por VIH en varones homosexuales.
De momento, el fármaco sólo está aprobado como tratamiento para personas ya infectadas. Sin embargo, los Centros de Control de enfermedades de EEUU (CDC en sus siglas en inglés) han querido adelantarse a su uso profiláctico experimental y acaban de publicar una guía dirigida a los profesionales que estén pensando en usar el medicamento en pacientes de alto riesgo.
"Existía preocupación por el hecho de que, sin la existencia de una guía, se produjeran prácticas no seguras o menos efectivas en los próximos meses", señala en sus recomendaciones el organismo que, con todo, recuerda que se está preparando un documento más detallado que verá la luz a medio plazo.
Los CDC hacen hincapié en que el fármaco sólo debe ser usado por hombres que mantengan relaciones sexuales con otros hombres, ya que todavía no se ha mostrado su efectividad en otros grupos de riesgo.
Además, recuerdan que sólo debe utilizarse en varones de alto riesgo (que mantengan relaciones con múltiples parejas o residen en un área con alta prevalencia de infecciones).
También han remarcado que, en ningún caso, se trata de una 'pastilla del día después' ya que, para que el tratamiento sea eficaz, debe tomarse diariamente. "No es una pastilla que puda tomarse sólo el sábado por la noche", ha señalado a Reuters Michael Horberg, vicepresidente de la 'HIV Medicine Association' estadounidense.
Los pacientes en tratamiento con este fármaco, recuerda el tratamiento, deben someterse periódicamente a una prueba del VIH y continuar usando otras medidas de prevención, como la utilización del preservativo.
Según las previsiones, los seguros de salud probablemente no cubrirán el tratamiento que tiene un coste de alrededor de 1.000 dólares (unos 729 euros) al mes en EEUU.

**Publicado en "El Mundo"

CONTACTO · Aviso Legal · Política de Privacidad · Política de Cookies

Copyright © Noticia de Salud