|   La migraña y la
  depresión son dos realidades complejas que están conectadas y se revelan como
  desafíos que exigen un enfoque integral. La Dra. Carmen González Oria,
  neuróloga y coordinadora de la Unidad de Cefaleas del Hospital Virgen del
  Rocío de Sevilla apuesta por un abordaje completo, desde el diagnóstico
  precoz hasta tratamientos combinados, destacando la importancia de la salud mental en
  pacientes con migraña y la necesidad de tratar simultáneamente ambas
  condiciones.  El último estudio
  “Depresión y Neurología”, publicado por la Sociedad Española de Neurología
  (SEN), revela que hasta
  un 50% de las personas con migraña puede desarrollar depresión.
  Según el informe, la prevalencia de depresión en personas con migraña es casi
  dos veces más alta que la población general. La migraña multiplica por 5 la
  probabilidad de sufrir síntomas depresivos. A medida que se incrementa la
  frecuencia de las crisis de migraña aumenta la probabilidad de sufrir
  síntomas de depresión. Por ello, las personas con migraña crónica tienen el
  doble de probabilidad de sufrir depresión que las personas con migraña
  episódica. Con el objetivo de
  abordar la migraña de forma integral, se ha desarrollado un programa especial
  de manejo conjunto y la expansión planificada en el marco del Plan Andaluz de
  Cefaleas. Se busca hacer más eficiente la atención a estos
  pacientes, redefiniendo la narrativa en torno a la migraña como una
  enfermedad que merece atención y comprensión. La Dra. González Oria, insta a mejorar hábitos de vida y destaca el papel
  fundamental de la terapia cognitivo conductual y la terapia psicológica en el
  tratamiento complementario, ofreciendo una perspectiva única
  sobre el manejo de la migraña que va más allá de lo puramente farmacológico.  La migraña, siendo la
  primera causa de discapacidad en adultos menores de 50 años en España,
  exige una atención integral y un cambio de paradigma que reconozca su impacto
  profundo en la salud mental. Si bien se subraya la importancia de los
  tratamientos farmacológicos, la Dra. González Oria resalta que “compartir experiencias y buscar
  recursos para manejar las situaciones que preocupan a los pacientes también
  es crucial”. En última instancia, este enfoque multidimensional
  busca no solo tratar la migraña sino también mejorar la calidad de vida y el
  bienestar emocional de quienes la padecen.   Diagnóstico Precoz Destacando el desafío
  al que se enfrentan los pacientes con migraña, la neuróloga enfatiza sobre la
  importancia de un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado para evitar
  el malestar asociado a las crisis y prevenir su cronificación. “La
  información precisa sobre la patología y la promoción de hábitos de vida
  saludables son esenciales para controlar la migraña episódica y reducir la
  posibilidad de comorbilidad psiquiátrica”, comenta. La Dra. González Oria
  insiste en la detección y tratamiento conjunto de ambas patologías,
  utilizando en ocasiones tratamientos preventivos con antidepresivos, cuando
  existe comorbilidad psiquiátrica. “De
  hecho, en la Unidad de Cefaleas del Hospital Virgen del Rocío, se implementa
  un programa especial de manejo conjunto con el equipo de Salud Mental, que
  consideramos necesario extender en el marco del Plan Andaluz de Cefaleas”. Resaltando la
  importancia del componente emocional en todas las patologías, la especialista
  destaca la necesidad de
  mejorar los hábitos de vida de los pacientes con migraña,
  incluyendo aspectos como sueño, alimentación, hidratación y ejercicio,
  fundamentales para la salud mental. “Los pacientes deben
  compartir los motivos de su empeoramiento durante las revisiones, ya que
  muchas veces están relacionados con el estrés, problemas familiares o
  preocupaciones”,
  explica la Dra. González Oria.
  Un abordaje integral, según la neuróloga, “es esencial para pacientes con
  migraña cronificada que presentan síntomas asociados como falta de ilusión,
  anhedonia, tristeza e indiferencia”. En un mensaje final
  sobre la migraña, la neuróloga destaca su condición como una enfermedad que
  requiere atención. Siendo la primera causa de discapacidad en adultos menores
  de 50 años, la Dra. González Oria aconseja a los pacientes tratarse las
  crisis a tiempo, adoptar buenos hábitos de vida y buscar ayuda profesional en
  caso de aumento de frecuencia de éstas o aparición de síntomas ansiosos o
  depresivos.       
 | 
No comments:
Post a Comment