Traductor

Showing posts with label linfedema. Show all posts
Showing posts with label linfedema. Show all posts

04 March 2022

6 DE MARZO, DÍA INTERNACIONAL DEL LINFEDEMA

 

 

 

 

 

   El linfedema es una enfermedad que afecta principalmente a las mujeres y su sistema linfático. Al tratarse de una patología incapacitante y de carácter crónico, requiere de cuidados sanitarios y médicos muy constantes para evitar su progresivo empeoramiento. En su tratamiento y control es clave, además, la participación del paciente a través de la adopción de hábitos higiénico-dietéticos adecuados, así como realizar  actividad física y deportiva, tal y como han señalado los especialistas tras dos años de confinamientos y restricciones que han agravado la condición de los pacientes.

 

“En el tratamiento del linfedema, el paciente adquiere un rol activo. Durante estos años de pandemia y de crisis sanitaria, los profesionales nos hemos enfocado en el tratamiento de la patología, pero ahora tenemos que volver a poner en valor que el paciente sea un agente activo porque la adopción de hábitos de vida saludable es clave para controlar mejor la patología”, advierte la Dra. Vicenta Pujol, responsable de la Unidad de Linfedema del Hospital Universitario Vall d'Hebron con motivo de la conmemoración del Día Internacional del Linfedema.

 

Entre los pacientes de riesgo destacan aquellos que son intervenidos quirúrgicamente de un cáncer, ya que debido al eliminar una parte importante de los ganglios linfáticos, se produce con una frecuencia variable linfedema en la extremidad afectada. Concretamente, el 30% de las casi 11.000 mujeres españolas que se someten cada año a una mastectomía sufren un linfedema, según datos del Colegio General de Colegios de Fisioterapeutas de España (CPFCM).

 

En el día a día, el impacto de la enfermedad en la calidad de vida es alto y provoca impotencia funcional, deformidad corporal, alteraciones emocionales y un riesgo considerable de infecciones graves como las linfangitis.

 

“Esta experiencia fue para mi peor que el cáncer. Es una sensación que compartimos muchas mujeres porque no está reconocido a pesar de lo que impacta en la calidad de vida del paciente. En general creo que hay mucho desconocimiento en torno a ella aunque el grado de afectación en el día a día es muy elevado”, señala Marina Wynia, paciente de linfedema.

 

El tratamiento médico está basado en lo que se conoce como terapia física compleja, que engloba: medidas de higiene y prevención, ejercicios de prevención, drenaje manual linfático y medidas de compresión como los vendajes multicapa y las medias y manguitos de compresión.

 

Además “involucrarse en el cuidado y tratamiento de la enfermedad y desarrollar actividades físicas, son medidas necesarias para volver a la medicina preventiva de la de la patología en la que el paciente tiene un rol y tú le acompañas y le das las herramientas para su control”, advierte la Dra.

 

Una enfermedad con un impacto psicológico elevado

 

Los síntomas más frecuentes del linfedema son la hinchazón y sensación de pesadez en la extremidad afectada, lo que puede llegar a alterar la imagen corporal del paciente y a pasar factura sobre su salud psicológica. “No es un accidente, es un efecto secundario de un tratamiento y no lo reconocen así. En mi caso, llevo una manga negra porque quiero que se vea, y que la gente me pregunte. Yo soy profesora de universidad y creo que es importante explicar y concienciar sobre ello”, recalca Marina.

 

Esta patología representa una transformación profunda en la imagen de las personas afectadas, su estilo de vida y la convivencia con la patología afecta desde un punto de vista emocional y psicológico. Esto es debido a que “en los estadios avanzados de la condición, se dificultan acciones cotidianas como vestirse o cualquier práctica deportiva que hay que adaptar”, recalca la Dra.

 

“El paciente busca en Google y con frecuencia encuentra imágenes de la enfermedad que no se corresponden con lo que va a tener él. Esa carga emocional la tienes que reconducir en consulta: es importante hablar con ella y hacerle entender que se va a trabajar en esa condición crónica para reducirla y mejorarla. Como médicos rehabilitadores, buscamos en todo momento ese margen de mejora y funcionalidad”, subraya la especialista.

 

Como parte de su compromiso con la formación y la mejora de la calidad de vida de los pacientes con linfedema, Essity, con su línea JOBST, ha impartido varios webinars dirigidos a los profesionales sanitarios para controlar esta afección inflamatoria a través de un abordaje multidisciplinar que sitúa al paciente y sus necesidades en el centro de la toma de decisiones.

 

18 March 2017

La Asociación Española de Linfedema demanda más conocimiento de la enfermedad entre los profesionales sanitarios



  La Organización Mundial de la Salud estima que 1 de cada 30 personas en el mundo está afectada por linfedema, un aumento de volumen (hinchazón) que se produce en cualquier parte del cuerpo y que puede estar provocado por un trastorno del sistema linfático ocasionado por la existencia de pocos vasos o ganglios de nacimiento (primario) o por causas externas como la cirugía, radioterapia, extirpación de ganglios, infección o traumatismo (secundario).
Con el fin de dar visibilidad a esta enfermedad, Ángela Río, Paloma Domingo, Irene del Olmo y Victoria Moreno, fisioterapeutas especializadas en tratamientos linfo-venosos y oncológicos desde hace más de 25 años, han creado la Asociación Española de Linfedema, una organización sin ánimo de lucro que tiene como objetivo ayudar a prevenirla o tratarla si ya existe, fomentar su investigación y dar a conocer los tratamientos más eficaces y que demanda más conocimiento de esta patología entre profesionales médicos, oncólogos y radiólogos, entre otros, para abordar el tratamiento y lograr estabilizar y normalizar la enfermedad.
“Existe un gran desconocimiento de los profesionales que están muy próximos a los pacientes oncológicos y que valoran poco o nada la posibilidad de aparición de un linfedema”, lamenta la vicepresidenta de AEL, Paloma Domingo, quien advierte que, una vez superado el cáncer, la aparición de esta enfermedad puede cambiar la calidad de vida de los pacientes que han superado el cáncer: “Es el recuerdo constante de su cáncer y además es una patología crónica que, una vez se hace presente, no desaparece”. Por este motivo, Domingo defiende que es muy importante hacer prevención y tratar a los pacientes en las fases iniciales, cuando se puede revertir la patología.
La gran mayoría de linfedemas en todo el mundo son secundarios y la causa más común es la filariasis linfática, aunque en los países industrializados, los tratamientos del cáncer se erigen como la principal causa.  En cuanto al linfedema primario, afecta dos veces más a mujeres que a hombres y aparecen en las piernas cuatro veces más que en los brazos. En un 70% de los casos afecta sólo a una pierna, empezando distalmente con un aumento del volumen del pie. No obstante, también pueden afectar a ambas piernas e incluso tronco, genitales, brazos y cara.
Nuevas vías terapéuticas para el tratamiento del linfedema
La presidenta de AEL, Ángela Río, explica que el tratamiento de esta patología se ha centrado en la Terapia Descongestiva o la Terapia Descongestiva Compleja, que consta de varias técnicas, como el drenaje linfático, vendajes de comprensión, cuidados de la piel y ejercicios activos: “Desde su descripción por el doctor Vodder en 1932, las técnicas de drenaje han evolucionado y han dejado atrás una forma estereotipada de trabajo. Existen varias escuelas con algunas diferencias en la concepción del tratamiento y la forma de realizar las maniobras, entre ellas Vodder, Földi, Leduc, Casley-Smith, Ferrandez”.
Según Río, los resultados han mejorado la calidad de vida de los pacientes y estos pueden seguir avanzando gracias al Método Godoy, una variante de la Terapia Descongestiva del linfedema, que incluye maniobras de drenaje linfático manual diferentes, medidas de contención distintas y ejercicios pasivos, que hasta ahora no se empleaban en Europa, además de los activos y de los cuidados de la piel. Con esta terapia, se puede normalizar cualquier tipo de linfedema, alcanzando casi el aspecto del miembro sano. Un logro que se mantiene en el tiempo siempre que el paciente se comprometa a seguir con su prenda de contención y a realizar un tratamiento de mantenimiento, ejercicio y dieta equilibrada”.
Una “marcha nórdica” para hacer visible la enfermedad
Con motivo del Día Mundial del Linfema, que se celebró el pasado 6 de marzo, la AEL ha organizado distintas actividades a lo largo del mes de marzo con el fin de dar visibilidad a esta patología. Entre ellas, destaca la “marcha nórdica”, un deporte de que consiste en caminar con la ayuda de bastones similares a los utilizados en el esquí. Esta actividad, dirigida a pacientes y familiares, ha contado con el apoyo de “Haciendo Huella” y tendrá lugar el 25 de marzo.
Según Domingo, existen numerosos estudios que demuestran las ventajas de la “marcha nórdica” respecto a otros ejercicios, ya que aumenta la resistencia del tren superior, la capacidad cardiopulmonar y el consumo de energía: “Tiene beneficios psicosociales, es un ejercicio que puede realizarse de forma grupal y hace aumentar la adherencia al ejercicio, de fácil aprendizaje.  Es una actividad sostenible”.
Desde la AEL, recomiendan a los pacientes con linfedema o riesgo de padecerlo que hagan ejercicio de manera regular y que mantengan una alimentación saludable para mantener los tejidos lo mejor posible y no sobrecargar el trabajo del sistema linfático.
La evidencia científica muestra el impacto en la participación social, dificultades físicas, psicológicas y económicas y, en consecuencia, la disminución de la calidad de vida de los pacientes que padecen linfedema. Por todo ello, las fundadoras de AEL defienden la importancia de esta asociación sin ánimo de lucro para divulgar su existencia, realizar programas de formación a profesionales, de educación sanitaria para pacientes y profesionales y crear sinergias con otros profesionales para fomentar la investigación en este ámbito. 


05 March 2010

Las pacientes de cáncer de mama demandan mejores recursos sanitarios


El linfedema es una de las principales secuelas del cáncer de mama, una realidad que afecta a una de cuatro mujeres como consecuencia de la cirugía para extirpar el tumor. También denominado edema linfático, este trastorno consiste en una hinchazón del brazo provocada por alteraciones en el sistema linfático y supone una importante limitación física en el desarrollo de determinadas actividades cotidianas. "En algunas ocasiones en el plano personal, acciones tan triviales como vestirse, ducharse o peinarse pueden representar todo un reto en las pacientes que, con frecuencia, llegan a depender de terceras personas", explica María Antonia Gimón, presidenta de la Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA).
En el ámbito laboral, las mujeres afectadas se enfrentan a otras muchas dificultades como consecuencia de los cambios físicos que sufren: problemas para reincorporarse al trabajo y continuar desempeñando sus funciones, así como menores opciones de promoción profesional. Estos y otros obstáculos derivan, en ocasiones, en la baja voluntaria, la jubilación anticipada o el despido. Por eso, en el Día Internacional de la Mujer, FECMA reivindica más atención y sensibilidad a las empresas y a las administraciones para atender y solucionar estos problemas. "Como mujeres trabajadoras, empresarias, empleadas, profesionales y funcionarias solicitamos medidas para cambiar esta realidad favoreciendo un clima laboral sensible a la actual situación de las afectadas que, en ocasiones, se puede solucionar simplemente ubicando a la afectada de forma temporal en un nuevo departamento o asignándole nuevas responsabilidades que no requieran de esfuerzos físicos", comenta su presidenta.


--La otra cara del linfedema
La prevención y el tratamiento del linfedema deben constituir una prioridad en las Unidades de Patología de la Mama del Sistema Nacional de Salud, reivindica FECMA en este día para dar solución a este problema. En este sentido, la Federación insta a que se implante de forma generalizada la prueba del "ganglio centinela" en todos los centros asistenciales como un paso indispensable para prevenir la aparición del linfedema.
Esta técnica consiste en analizar un único ganglio axilar que será el que determine si puede haber o no otros afectados. De esta forma, se evita extirpar de manera indiscriminada los ganglios de la zona y, por tanto, las secuelas. Como parte de este proceso asistencial, María Antonia Gimón señala que "el tratamiento rehabilitador de manera precoz y continuada deba constituir una prioridad en las pacientes a fin de garantizar una mejora en su calidad de vida".


--Soporte psicológico
Junto a la rehabilitación cuando existe un linfedema, la otra gran necesidad de las afectadas es el apoyo psicológico. "Frustración, sensación de dependencia, baja autoestima son sólo algunas de las muchas emociones encontradas en las pacientes como consecuencia de todos los procesos a los que se enfrentan y los cambios que van sufriendo en su imagen", explica Gimón.
Por ello, la Federación Española de Cáncer de Mama demanda un servicio de atención psicológica desde el momento en que se comunica el diagnóstico del cáncer de mama y a lo largo de todo el proceso de la enfermedad. "La mayoría de las afectadas tienen una percepción de que el núcleo básico de apoyo durante todo el proceso son ellas mismas ya que, de forma generalizada, comparten el sentimiento de que su entorno no les entiende y que sólo pueden hacerlo las personas que pasan por la misma experiencia. Como mujeres que sobrevivimos a la enfermedad compartimos afectos y experiencias", explica la presidenta. En este sentido, las asociaciones de pacientes cumplen también un papel esencial como grupos de autoayuda.

CONTACTO · Aviso Legal · Política de Privacidad · Política de Cookies

Copyright © Noticia de Salud