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11 January 2012

La Escuela de Medicina de la Universidad de Padua convoca los XIII Premios Morgagni con el patrocinio de Laboratorios Servier



La Escuela de Medicina de la Universidad de Padua ha convocado la XIII edición de los Premios Morgagni, con el patrocinio de Laboratorios Servier. Estos galardones, creados en 1984, tienen como principal objetivo fomentar los avances científicos en el ámbito de las enfermedades metabólicas y la diabetes.
Los candidatos tienen hasta el 29 de febrero para presentar sus trabajos, que deberán enviarse al profesor Gaetano Crepaldi, a través de la web www.morgani-prizes.com. El premio principal, la medalla de oro, tiene una dotación de 20.000 euros y se otorga a un científico europeo con una larga trayectoria profesional, a propuesta de al menos dos expertos que proporcionen el curriculum vitae del candidato y un breve escrito de apoyo.
Las dos medallas de plata, con una dotación de 8.000 euros cada una, se conceden a jóvenes investigadores menores de 40 años. Para optar a esta categoría, los candidatos deben de enviar una breve carta de solicitud, curriculum vitae, junto con una lista de publicaciones y reediciones de sus cinco trabajos más importantes.
Los ganadores se darán a conocer en el acto de entrega de los Premios Morgagni, que este año se celebrará en el marco del “XI Simposio Europeo sobre el metabolismo" el 19 de octubre en Padua (Italia).
Como en anteriores ediciones, la responsabilidad de decidir la adjudicación de los Premios recae sobre un Jurado internacional compuesto por 13 personalidades, en su mayoría, científicos europeos, de Italia, Francia, España, Israel, Bélgica, Alemania, Hungría, Inglaterra y Suiza.
Desde sus comienzos, los Premios G.B. Morgagni se han posicionado como los más prestigiosos de Europa en campo del metabolismo. Estos Premios, que se celebran cada dos años, fueron instituidos por un grupo de investigadores de postdoctorado que trabajaban en la Escuela de Medicina de la Universidad de Padua. La finalidad de los mismos fue la de ofrecer a la población europea afectada por enfermedades metabólicas, una mejor y mayor calidad de vida.

Desarrollan un nuevo sistema para identificar y bloquear patógenos dañinos



Investigadores de la Universidad de Duke, en Estados Unidos, han desarrollado una nueva forma de identificar genes de microbios nocivos, en particular, aquellos que han sido difíciles de analizar en el laboratorio.
Este nuevo método, descrito en 'Proceedings of the National Academy of Sciences' (PNAS), utiliza productos químicos para crear bacterias mutantes, y secuenciación genómica para identificar todas las mutaciones. Mediante la búsqueda de genes mutantes comunes en la bacteria clamidia, que comparten un rasgo en particular, los investigadores fueron capaces de identificar rápidamente los genes responsables de ese rasgo.
El enfoque es versátil y barato, así que podría ser aplicado en el estudio de una amplia gama de microorganismos, afirma el doctor Rafael Valdivia, profesor de Genética Molecular y Microbiología, en Duke.
"Hemos sido capaces de averiguar más datos acerca de los genes que permiten el florecimiento de la clamidia en sus huéspedes sin recurrir al largo proceso tradicional de domesticación de los patógenos para que acepten el ADN recombinante", explica Valdivia, quien agrega que dicho enfoque "une las técnicas clásicas de la microbiología con la secuenciación genómica del siglo XXI".
"Si se encuentra un nuevo microorganismo peligroso, y se quieren determinar sus genes importantes, nuestro sistema representa una forma efectiva de obtener esta información tan rápido como sea posible", asegura.
Uno de los objetivos de estas investigaciones es el estudio de patógenos microbianos que dañan a seres humanos y animales, para localizar y alterar los genes necesarios para la infección, afirma Valdivia.
El microbio en este estudio, la clamidia --que generalmente causa una enfermedad de transmisión sexual-- se esconde en las células humanas, y la enfermedad que causa debe ser transmitida desde un huésped a otro. La clamidia es una de las infecciones de transmisión sexual más comunes, y el principal factor de riesgo de enfermedad inflamatoria pélvica e infertilidad.
En el presente estudio, según Valdivia, "al aislar genes mutantes que no crecen bien dentro de las células, e identificar las mutaciones subyacentes, pudimos aprender mucho acerca de cómo estos genes contribuyen a la enfermedad. Para nosotros, esto acelera significativamente el análisis de la clamidia y, lo más importante, puede ser aplicable a muchos otros microbios que han sido difíciles de manipular con métodos de ADN recombinante".
El investigador, además, sugiere que los microbios, incluso los asociados con nuestra flora intestinal normal, se han abierto a la exploración para que podamos aprender cómo influyen sus genes en la salud humana, incluidos los trastornos alimentarios y la enfermedad inflamatoria intestinal. Valdivia concluye que, además, la nueva técnica podría ayudar a crear vacunas contra la clamidia.



**EUROPA PRESS

Bacteria in the gut of autistic children different from non-autistic children

The underlying reason autism is often associated with gastrointestinal problems is an unknown, but new results to be published in the online journal mBio® on January 10 reveal that the guts of autistic children differ from other children in at least one important way: many children with autism harbor a type of bacteria in their guts that non-autistic children do not. The study was conducted by Brent Williams and colleagues at the Mailman School of Public Health at Columbia University.
Earlier work has revealed that autistic individuals with gastrointestinal symptoms often exhibit inflammation and other abnormalities in their upper and lower intestinal tracts. However, scientists do not know what causes the inflammation or how the condition relates to the developmental disorders that characterize autism. The research results appearing in mBio® indicate the communities of microorganisms that reside in the gut of autistic children with gastrointestinal problems are different than the communities of non-autistic children. Whether or not these differences are a cause or effect of autism remains to be seen.
"The relationship between different microorganisms and the host and the outcomes for disease and development is an exciting issue," says Christine A. Biron, the Brintzenhoff Professor of Medical Science at Brown University and editor of the study. "This paper is important because it starts to advance the question of how the resident microbes interact with a disorder that is poorly understood."
Bacteria belonging to the group Sutterella represented a relatively large proportion of the microorganisms found in 12 of 23 tissue samples from the guts of autistic children, but these organisms were not detected in any samples from non-autistic children. Why this organism is present only in autistic kids with gastrointestinal problems and not in unaffected kids is unclear.
"Sutterella has been associated with gastrointestinal diseases below the diaphragm, and whether it's a pathogen or not is still not clear," explains Jorge Benach, Chairman of the Department of Microbiology at Stony Brook University and a reviewer of the report. "It is not a very well-known bacterium."
In children with autism, digestive problems can be quite serious and can contribute to behavioral problems, making it difficult for doctors and therapists to help their patients. Autism, itself, is poorly understood, but the frequent linkage between this set of developmental disorders and problems in the gut is even less so.
Benach says the study was uniquely powerful because they used tissue samples from the guts of patients. "Most work that has been done linking the gut microbiome with autism has been done with stool samples," says Benach, but the microorganisms shed in stool don't necessarily represent the microbes that line the intestinal wall. "What may show up in a stool sample may be different from what is directly attached to the tissue," he says.
Tissue biopsy samples require surgery to acquire and represent a difficult process for the patient, facts that underscore the seriousness of the gastrointestinal problems many autistic children and their families must cope with.
Benach emphasizes that the study is statistically powerful, but future work is needed to determine what role Sutterella plays, if any, in the problems in the gut. "It is an observation that needs to be followed through," says Benach.

**Source: American Society for Microbiology

Los suplementos vitamínicos pueden ser peligrosos en personas mayores según un estudio

Los suplementos nutricionales están en el punto de mira. Una revisión de los datos que se han publicado sobre los añadidos de vitaminas y minerales ha concluido que no solo no aumentan la longevidad de quienes los toman, sino que incluso parece que entre quienes los ingieren la mortalidad es mayor. El trabajo lo ha publicado la revista Archives of Internal Medicine.
En concreto, el estudio clave es uno que ha tomado datos de casi 39.000 mujeres a las que se preguntó por sus hábitos al respecto entre 1986 y 2004. Las encuestadas tenían entre 55 y 69 años al comienzo del periodo. Y la conclusión es que la tasa de mortalidad era superior entre las que tomaban ese tipo de productos. Concretamente, se vio esa relación con multivitaminas, vitamina B6, ácido fólico, hierro, cobre, cinc y magnesio. La ingesta de vitamina A, beta-carotenos y selenio no tenía un efecto significativo. Solo el calcio —tomado directamente y no como vitamina D, que ayuda a fijarlo— estaba relacionado con una disminución de la mortalidad.
Como recuerdan los autores de un análisis del trabajo que ha realizado la web Medscape, este estudio concuerda con otro Cochrane (una metodología que analiza trabajos previos), en el que se revisaron 77 estudios que involucraban a 232.550 personas, en las que se midió el efecto de los antioxidantes, sin que se viera que estos influyeran.

-Resistencias
La publicación digital va aún más lejos. El titular de su artículo admite que los resultados son chocantes, y que van a encontrar la resistencia de muchas personas, entre ellas facultativos y usuarios. Por eso es un tajante Vitaminas a la basura: convenza a sus pacientes.
Los datos están avalados por una condición. Curiosamente, las mujeres que informaban de que tomaban estos suplementos eran las que, en el momento inicial, manifestaron que estaban en mejores condiciones de salud. Por eso que fuera ese grupo el que al final registrara las mayores tasas de mortalidad son una señal preocupante.
Lógicamente, se han tomado datos de mujeres sanas. La desnutrición está muchas veces asociada al aumento de la edad (en España, algunos informes calculan que hasta un 20% de los mayores no está bien alimentado), y en ese caso los suplementos están recomendados.

**Publicado en "EL PAIS"

Early-stage breast cancer patients lack knowledge; may not receive treatment they prefer

According to the results of a new study published in the January 2012 issue of the Journal of the American College of Surgeons, many early-stage breast cancer survivors lacked knowledge about their disease and were not meaningfully involved in treatment discussions or asked their preferences regarding the approach to treatment. As a result, the study's investigators determined that there is a need for improvements in the quality of the surgical decision-making process for these patients. The retrospective study sought to evaluate the quality of the decision-making process regarding the options for surgical treatment. The "quality" for early-stage breast cancer patients in this study was defined as the degree to which a decision was informed and consistent with patient preferences. Although several other studies have found knowledge gaps and identified specific patient concerns that affect decisions about breast cancer surgery, this is the first study that attempted to examine how often treatments actually reflect patient preferences.
Surveys were mailed to adult women with a history of early-stage invasive breast cancer (stages I and II) treated at one of four academic medical centers: The Dana-Farber Cancer Institute, Boston; Massachusetts General Hospital, Boston; University of California, San Francisco; and University of North Carolina, Chapel Hill. Patients answered about half of the questions right (average knowledge score was 52.7 percent), indicating some large gaps in knowledge for information that providers identified as critical. Less than half (48.6 percent) of study participants reported that their surgeon asked them about their preference regarding surgical treatment.
The data was collected an average of two-and-a-half years following the surgical procedure and recognized the fact that patients are likely to forget some information over time. However, the knowledge gaps concerned not just detailed information but also basic general concepts. For example, only half of the surveyed patients knew that the survival rate was the same for breast-conservation therapy and mastectomy. In addition, women who had a partial mastectomy were less knowledgeable about local recurrence rates than were women who had a mastectomy.
"This finding was concerning because patients who opt for partial mastectomy need to be aware of their slightly higher risk of local recurrence," said Clara N. Lee, MD, MPP, FACS, lead author of the study and an associate professor and director of surgical research at the University of North Carolina School of Medicine in Chapel Hill. "Patients and providers need to have transparent conversations about treatment options, risks and goals in order to make fully informed decisions."
The study stated that improving the quality of decisions about breast cancer surgery will require interventions to enhance patient knowledge and incorporate preferences into the decision-making process. "Two things are needed to help improve the quality of decisions. First, it is important to have a way to measure decision quality so that providers can get feedback on how they are doing. Second, we need to use decision tools that have been proven to inform and engage patients, more consistently," added Karen Sepucha, PhD, senior study author, assistant professor at Harvard Medical School and director of the Health Decision Sciences Center at Massachusetts General Hospital.
Of the 746 patients identified in the study, 440 participated (59 percent). The data showed that 45.9 percent of respondents knew that local recurrence risk is higher after breast conservation and 55.7 percent knew that survival is equivalent for the two options. Participants reported more frequent discussion of partial mastectomy and its advantages than of mastectomy, and 83.2 percent reported the provider made a treatment recommendation.
The survey included 10 multiple-choice questions regarding breast cancer knowledge, including treatment options, local recurrence, survival and side effects -- six items that were rated on a scale from 0 (not at all important) to 10 (extremely important) in the goals and concerns category -- and an additional seven multiple-choice items about the content of discussions with providers and how involved the patient was in the decision-making process. The decision about the type of surgical procedure for early-stage breast cancer is considered a "preference-sensitive" decision. Patients in this study were clinically eligible for either option, and an international consensus process has defined the quality of decision-making as the degree to which a decision is informed and concordant with patient preferences

*Source: American College of Surgeons

Swallow a pill and let your doc tour your insides

Researchers at Brigham and Women's Hospital (BWH) have successfully tested a controllable endoscopic capsule, inspired by science fiction, that has the ability to "swim" through the body and could provide clinicians with unprecedented control when photographing the inside of the human body. The capsule is designed to be swallowed like a pill and can be equipped with a camera. Once inside the patient's digestive track, a doctor can "steer" the capsule through the body using an MRI machine, photograph specific areas of interest, and view those pictures wirelessly.
With current endoscopic capsule technology, the capsule tumbles randomly through the digestive track and clinicians have no control over what areas of the body are being photographed. The ability to steer a capsule, aim a camera, and take pictures of specific areas of concern is a major leap forward with the potential for broad medical implications.
"Our goal is to develop this capsule so that it could be used to deliver images in real time, and allow clinicians to make a diagnosis during a single procedure with little discomfort or risk to the patient," said Noby Hata, a researcher in the Department of Radiology at BWH and leader of the development team for the endoscopic capsule. "Ideally, in the future we would be able to utilize this technology deliver drugs or other treatments, such as laser surgery, directly to tumors or injuries within the digestive track."
BWH researchers Hata and his colleague, Peter Jakab, have successfully tested a prototype of their capsule in an MRI machine and proved that the capsule can be manipulated to "swim" through a tank of water. The next step in their research is to successfully test the capsule inside a human body. There is no reason to believe the capsule would move differently in a human than it does in a tank of water.

*Source: Brigham and Women's Hospital

Un grupo de científicos españoles descubre un tratamiento eficaz contra el Pian, una enfermedad "olvidada"

Científicos españoles demuestran la eficacia de un nuevo tratamiento contra el Pian, una de las 17 enfermedades que la Organización Mundial de la Salud (OMS) cataloga como 'olvidadas'. Consiste en la administración de una única pastilla que, según los expertos, podría incluso conseguir la erradicación definitiva de esta infección crónica que erosiona la piel, los huesos y los cartílagos.
Este hallazgo, afirma el principal autor de la investigación, Oriol Mitjà, "abre las puertas a que, por segunda vez en la historia, se pueda erradicar una enfermedad. La primera fue la viruela, en 1978". Un gran logro para la salud pública mundial, sobre todo "si pensamos que se trata de una enfermedad doblemente olvidada, ya que afecta a los niños [el 75% de los afectados son menores de 15 años], una población con la que no se hace investigación casi nunca".
Se calcula que hay más de 500.000 personas con esta enfermedad, principalmente en poblaciones pobres y marginadas de África, Asia y América del Sur. Se transmite por contacto cutáneo, habitualmente a través de heridas, que son las que permiten la entrada de la bacteria que lo produce (Treponema pertenue). "Se disemina por todo el cuerpo y aparecen lesiones cutáneas. Si no se trata, en menos de un año puede penetrar en los huesos y producir deformaciones óseas", explica Mitjá en su artículo, publicado en la revista 'The Lancet'.
Ya en 1950, cuando había más de 50 millones de personas con Pian en el mundo, la OMS puso en marcha una campaña de control en 46 países, basada en un tratamiento con inyecciones de penicilina. En 1970 la prevalencia se redujo en un 95%. Sin embargo, puntualiza Mitjà, "la cobertura no fue total y no se consiguió erradicar la enfermedad. Quedaron focos residuales en zonas remotas y ahí es donde está resurgiendo 40 años después".

-Una segunda oportunidad
En un nuevo intento por controlar el Pian, Mitjà y su equipo proponen una alternativa a la penicilina: un tratamiento antimicrobiano oral denominado azitromicina. Resulta tan eficaz como la terapia convencional y además presenta algunas ventajas: "Su administración no requiere personal médico, no causa efectos secundarios (alergias) ni tiene el riesgo de contagiar infecciones por vía parenteral (VIH y herpes)", según reza el artículo. "Tampoco produce el dolor persistente o los abcesos que a veces ocurren con los inyectables", agrega el experto español.
Así lo constató el grupo de científicos en un ensayo clínico realizado con 250 niños de Papúa Nueva Guinea (entre seis meses y 15 años). La mitad recibió inyecciones de penicilina y la otra mitad una pastilla de azitromicina. Aunque en 15 días la pastilla consiguió curar la lesión cutánea y el hueso, el seguimiento se prolongó durante seis meses. En ese tiempo, quienes tomaron el nuevo tratamiento tuvieron una tasa de curación de un 96% frente al 93% de aquellos que fueron tratados con penicilina. "No encontramos resistencia ni intolerencia ni observamos efectos adversos", apuntan los autores en el estudio.
Aunque no hay análisis sobre el coste y la eficacia, "creemos que como no necesita jeringuilla ni personal médico, probablemente sería costo-eficaz", subraya Mitjà.
Ahora que la OMS conoce los resultados de este prometedor estudio, se ha establecido una reunión en Ginebra el 5 de marzo para decidir si se realiza un cambio de política en el tratamiento del Pian. Una vez se apruebe, afirma el investigador Mitjà, "lo que haremos será administrar la azitromicina de forma masiva a unas 20.000 personas en la isla de Lihir (en Papúa Nueva Guinea) para demostrar que elimina la enfermedad. Será entonces cuando la OMS implemente esta nueva estrategia en el resto del mundo". Si Mitjà calcula que en la isla de Lihir podrá eliminarse Pian "en unos cinco años, la erradicación mundial llevará unos 20", augura.

**Publicado en "EL MUNDO"

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