“Cada vez es más evidente que la innovación en los tratamientos oncológicos y la medicina personalizada se traducen en beneficios para las pacientes, en terapias menos agresivas y en una mejor calidad de vida”, asegura Antonia Gimón, vocal de la Junta Directiva de la Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA), tras conocer los resultados del Estudio de Percepciones de las pacientes con cáncer de mama Her2+ sobre las vías de administración de los tratamientos oncológicos. Dicho estudio, asegura que 9 de cada 10 afectadas prefiere ser tratada con una terapia subcutánea frente a la vía intravenosa. El estudio, que evalúa la experiencia de 68 mujeres y ha sido realizado por la Federación con la colaboración de Roche Farma, muestra que las mujeres tratadas mediante terapia subcutánea experimentan una mayor sensación de libertad y una menor dependencia física y psicológica del tratamiento. “Estudios de esta naturaleza tienen interés, porque se trata de conocer y explicar, a partir de las propias percepciones de las pacientes, cómo los avances en innovación oncológica se pueden traducir en beneficios para las pacientes de cáncer de mama y les ayudan a desarrollar una mejor calidad de vida, en este caso, de pacientes con cáncer de mama HER2+”, asegura Antonia Gimón. En este sentido, Roswitha Britz, presidenta de FECMA, afirma que la Federación “siempre ha expresado su apoyo a la investigación y la innovación, porque son estas las que puede conseguir mayores avances en los tratamientos oncológicos”.
Las pacientes relacionan el uso de la vía subcutánea con una mejoría de la calidad de vida, una mayor comodidad y una reducción considerable del tiempo necesario para la administración del tratamiento. En la formulación subcutánea, el paciente recibe la medicación a través de una inyección aplicada bajo la piel, que se administra en unos pocos minutos (de dos a cinco minutos), manteniendo la misma eficacia y la misma seguridad que con la formulación intravenosa y, por lo tanto, reducir el tiempo de estancia en el Hospital de Día, hecho altamente valorado por las pacientes, sobre todo por las más jóvenes. Cabe destacar que la administración subcutánea reporta, según las encuestadas, unos beneficios que atañen también al entorno familiar, social y laboral, puesto que muchas afectadas acuden acompañadas a recibir el tratamiento. “Es muy importante y de gran valor para las pacientes la organización de su tiempo, menor ruptura con la rutina diaria y un menor esfuerzo organizativo”, asegura la presidenta de la Federación.
La terapia subcutánea se percibe como una menor conexión con la “esencia” del cáncer, en el sentido de que el tratamiento oncológico se percibe como “muy duro” cuando éste se asocia a la vía intravenosa. Esta nueva vía de administración se percibe entre las afectadas como una nueva etapa en el tratamiento de la enfermedad, más benévola, que dota a las pacientes de una mayor autonomía.
La vocal de FECMA subraya la importancia de que “las pacientes sientan que son consideradas sujetos activos, que sus opiniones son escuchadas. Para ellas es importante Disponer de algo más de tiempo, pues ello influye, sin duda, en su calidad de vida y más aún, el hecho de que se trate de tratamientos algo menos agresivos”. Con la vía de administración subcutánea las pacientes proyectan un mayor positivismo (91% de los casos), a la hora de afrontar el tratamiento y una ruptura psicológica con la parte más dura de la terapia contra el cáncer (76% de las pacientes), ligada fundamentalmente a la administración intravenosa del tratamiento.
Cualquier paciente con cáncer sabe lo que implica un tratamiento oncológico intravenoso, el deterioro que para las venas supone una administración que se repite cada cierto tiempo durante meses. La terapia subcutánea hace que las venas dejen de “sufrir”, lo que supone otro argumento más para que las pacientes asocian sentimientos positivos al uso de esta nueva vía de tratamiento.
El tratamiento subcutáneo contribuye, además, a mejorar la congestión de los Hospitales de Día y disminuir el tiempo que los profesionales sanitarios dedican a cada paciente. En este sentido, asegura Britz, “los destinatarios de los resultados de este estudio, deben ser, prioritariamente, las administraciones sanitarias y los profesionales de la sanidad, porque es a ellos a quienes les corresponden temas como la gestión y la aplicación en la práctica de los tratamientos, la información veraz, completa y asequible a la paciente, la dotación de los presupuestos para innovación en oncología, la definición de prioridades, la aprobación de una cartera de servicios igual que evite inequidades, etcétera”. Por su parte, Antonia Gimón añade que “hablamos de pacientes con cáncer de mama y los tratamientos oncológicos que puedan recibir están directamente vinculados a la responsabilidad de las administraciones sanitarias, a los presupuestos disponibles para investigación e innovación y a las decisiones de los profesionales de la sanidad”, concluye.