Por tercer año consecutivo, el Museo Picasso Málaga celebra el Día Internacional de la Discapacidad con el propósito de acercar el arte y la cultura a todas las personas. Así, mañana viernes 2 de diciembre se realizará una jornada de encuentro entre los participantes del Programa para personas con necesidades especiales o en riesgo de exclusión social que lleva a cabo el Museo Picasso Málaga con el patrocinio de la Obra Social de Unicaja. Se trata de agradecer el interés y el apoyo de las más de 180 entidades, asociaciones, hospitales y centros asistenciales de toda Andalucía que colaboran con el Museo Picasso Málaga.
A las 12.00 horas tendrá lugar en el Auditorio un encuentro de grupos con necesidades especiales, profesionales de la salud, educadores y monitores, en el que algunos participantes contarán sus impresiones tras sus experiencias en el Museo. Tras esta presentación, a las 13.00 horas, el Auditorio MPM acogerá el espectáculo La Llama Doble, de Octavio Paz, de la compañía gaditana de ballet clásico y psicodanza Flick, Flock Danza, en la que el 50% de sus integrantes sufren algún tipo de discapacidad, bien se trate de ceguera, parálisis cerebral, hiperactividad u otra discapacidad física o psíquica. Para esta compañía, el movimiento expresa la singularidad de cada persona que, unido a la danza clásica y contemporánea, posibilita contrastes y yuxtaposiciones en la que el cuerpo adquiere una nueva estética.
La celebración anual, el 3 de diciembre, del Día Internacional de las Personas con Discapacidad tiene por objeto sensibilizar a la opinión pública sobre las cuestiones relacionadas con la discapacidad y movilizar el apoyo a la dignidad, los derechos y el bienestar de las personas con discapacidad. También se propone promover la toma de conciencia sobre los beneficios que se derivan de la integración de las personas con discapacidad en todos los aspectos de la vida política, social, económica y cultural. Con este objetivo, el Museo Picasso Málaga desarrolla desde su apertura un intenso programa educativo que, patrocinado por la Obra Social de Unicaja desde 2007, integra actividades especialmente dedicadas a las personas con discapacidad y por el que han pasado ya más de 6.000 participantes con necesidades especiales y en riesgo de exclusión.
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01 December 2011
El 27 de enero se estrena "Arrugas" un filme con otra visión de las residencias y el Azlheimer
WANDA estrenara el próximo 27 de enero la película ARRUGAS basada en en el Comic de Paco Roca y dirigida por Ignacio Ferreras. ARRUGAS, producida por Manuel Cristobal (Perro Verde Films), se presentó en el pasado Festival de Cine de San Sebastian con gran éxito. Ha sido catalogada por THE HOLLYWOOD REPORTER como "una de las películas españolas más logradas de los últimos años en cualquier género". Además, está preseleccionada al Oscar a la Mejor Película de Animación.
ARRUGAS es un largometraje de animación 2D basado en el aclamado cómic del mismo título de Paco Roca (Premio Nacional de Cómic 2008). Arrugas narra la amistad entre Emilio y Miguel, dos ancianos recluidos en un geriátrico. Emilio, que acaba de llegar a la residencia en un estado inicial de Alzheimer será ayudado por Miguel y otros compañeros para no acabar en la planta superior de la residencia, el temido piso de los asistidos que es como llaman allí a los deshauciados. Su alocado plan tiñe de comedia y ternura el tedioso día a día de la residencia porque aunque para muchos sus vidas habían acabado, ellos .
ARRUGAS es un largometraje de animación 2D basado en el aclamado cómic del mismo título de Paco Roca (Premio Nacional de Cómic 2008). Arrugas narra la amistad entre Emilio y Miguel, dos ancianos recluidos en un geriátrico. Emilio, que acaba de llegar a la residencia en un estado inicial de Alzheimer será ayudado por Miguel y otros compañeros para no acabar en la planta superior de la residencia, el temido piso de los asistidos que es como llaman allí a los deshauciados. Su alocado plan tiñe de comedia y ternura el tedioso día a día de la residencia porque aunque para muchos sus vidas habían acabado, ellos .
Muchas mujeres podrían necesitar más betacaroteno para alcanzar unos niveles suficientes de vitamina A
Según un estudio realizado en el Reino Unido gran parte de la población femenina podría tener una capacidad limitada para absorber el betacaroteno y convertirlo en vitamina A debido a variaciones genéticas.
El estudio investigó los efectos de cuatro variaciones genéticas comunes (polimorfismos de un solo nucleótido, SNP por sus siglas en inglés) de la enzima que convierte el betacaroteno en vitamina A (retinol) en 28 mujeres con una edad media de 20 años (1). Los resultados del estudio mostraron que tres de los cuatro SNP redujeron la conversión de betacaroteno hasta un 59%. Además, se detectaron muchas variaciones en la frecuencia de SNP en 11 grupos étnicos diferentes, con frecuencias que oscilaron entre el 43 y el 100%.
Los investigadores concluyeron que un determinado rango de SNP puede reducir la efectividad de usar carotenoides provitamina A, basados en plantas como el betacaroteno, para aumentar los niveles de vitamina A en grupos de la población con riesgo de deficiencia. Este efecto podría variar dependiendo del origen étnico de los sujetos. Por lo tanto, la gente con una capacidad reducida para convertir las fuentes de provitamina A en vitamina A activa podría ser susceptible de sufrir muy diversos riesgos para la salud. Esto resulta especialmente importante teniendo en cuenta que un estudio reciente probó que aproximadamente el 45% de los europeos posee una variante genética que reduce la cantidad de betacaroteno que el cuerpo puede utilizar y convertir en vitamina A. Teniendo en cuenta las restricciones genéticas en cuanto a la utilización del betacaroteno, la recomendación diaria quizá debería aumentarse considerablemente o, en su defecto, estos sujetos deberían aumentar su consumo de vitamina A preformada a través de fuentes animales o suplementos.
Hace poco, expertos en carotenoides de distintos países dieron una respuesta unánime que afirma que el betacaroteno es indispensable como fuente segura de vitamina A (2). Puesto que el consumo de vitamina A preformada procedente de productos animales no es suficiente en partes de la población de Europa, EE. UU. y Asia, el betacaroteno tendría una importante función para proporcionar un consumo adecuado de vitamina A total.
La vitamina A es esencial para un desarrollo y crecimiento normal, para el sistema inmunitario, la vista y otras funciones del cuerpo humano. Puesto que los humanos no pueden sintetizar la vitamina A, han de seguir una dieta con vitamina A preformada o carotenoides de provitamina A. Al absorberse, los carotenoides de provitamina A se pueden convertir en vitamina A a través de la enzima betacaroteno 15,15’-monooxigenasa (BCO). Investigaciones recientes han demostrado que dos SNP comunes dentro de la región genética que codifica el BCO causan una actividad catalítica reducida de la enzima, lo que confirma que las variaciones genéticas contribuyen a una utilización baja del betacaroteno.
La deficiencia de vitamina A es un problema sanitario grave que afecta principalmente a mujeres embarazadas y en lactancia y a niños en edad preescolar, con un total de unos 250 millones de personas con riesgo de desarrollar desórdenes por deficiencia de vitamina A (3). La mayoría de las necesidades de vitamina A de la población de Reino Unido, por ejemplo, no se cubre a través del consumo en dieta de retinol preformado, y un 15% de sujetos jóvenes de edades comprendidas entre los 19 y los 24 años hace un consumo de vitamina A total inferior al nivel más bajo de consumo de nutrientes recomendado.
**publicado en el BOLETIN INFORMATIVO NUTRI-FACTS
El estudio investigó los efectos de cuatro variaciones genéticas comunes (polimorfismos de un solo nucleótido, SNP por sus siglas en inglés) de la enzima que convierte el betacaroteno en vitamina A (retinol) en 28 mujeres con una edad media de 20 años (1). Los resultados del estudio mostraron que tres de los cuatro SNP redujeron la conversión de betacaroteno hasta un 59%. Además, se detectaron muchas variaciones en la frecuencia de SNP en 11 grupos étnicos diferentes, con frecuencias que oscilaron entre el 43 y el 100%.
Los investigadores concluyeron que un determinado rango de SNP puede reducir la efectividad de usar carotenoides provitamina A, basados en plantas como el betacaroteno, para aumentar los niveles de vitamina A en grupos de la población con riesgo de deficiencia. Este efecto podría variar dependiendo del origen étnico de los sujetos. Por lo tanto, la gente con una capacidad reducida para convertir las fuentes de provitamina A en vitamina A activa podría ser susceptible de sufrir muy diversos riesgos para la salud. Esto resulta especialmente importante teniendo en cuenta que un estudio reciente probó que aproximadamente el 45% de los europeos posee una variante genética que reduce la cantidad de betacaroteno que el cuerpo puede utilizar y convertir en vitamina A. Teniendo en cuenta las restricciones genéticas en cuanto a la utilización del betacaroteno, la recomendación diaria quizá debería aumentarse considerablemente o, en su defecto, estos sujetos deberían aumentar su consumo de vitamina A preformada a través de fuentes animales o suplementos.
Hace poco, expertos en carotenoides de distintos países dieron una respuesta unánime que afirma que el betacaroteno es indispensable como fuente segura de vitamina A (2). Puesto que el consumo de vitamina A preformada procedente de productos animales no es suficiente en partes de la población de Europa, EE. UU. y Asia, el betacaroteno tendría una importante función para proporcionar un consumo adecuado de vitamina A total.
La vitamina A es esencial para un desarrollo y crecimiento normal, para el sistema inmunitario, la vista y otras funciones del cuerpo humano. Puesto que los humanos no pueden sintetizar la vitamina A, han de seguir una dieta con vitamina A preformada o carotenoides de provitamina A. Al absorberse, los carotenoides de provitamina A se pueden convertir en vitamina A a través de la enzima betacaroteno 15,15’-monooxigenasa (BCO). Investigaciones recientes han demostrado que dos SNP comunes dentro de la región genética que codifica el BCO causan una actividad catalítica reducida de la enzima, lo que confirma que las variaciones genéticas contribuyen a una utilización baja del betacaroteno.
La deficiencia de vitamina A es un problema sanitario grave que afecta principalmente a mujeres embarazadas y en lactancia y a niños en edad preescolar, con un total de unos 250 millones de personas con riesgo de desarrollar desórdenes por deficiencia de vitamina A (3). La mayoría de las necesidades de vitamina A de la población de Reino Unido, por ejemplo, no se cubre a través del consumo en dieta de retinol preformado, y un 15% de sujetos jóvenes de edades comprendidas entre los 19 y los 24 años hace un consumo de vitamina A total inferior al nivel más bajo de consumo de nutrientes recomendado.
**publicado en el BOLETIN INFORMATIVO NUTRI-FACTS
Declaraciones del Director General Foro Interalimentario en la Fundación HEFAME
El director general de Foro Interalimentario José Ignacio Arranz defiende en la Real Academia de Medicina y Cirugía de Murcia que “sólo el industrial de la alimentación está capacitado para colocar alimentos seguros en el mercado”. Arranz ofreció la ponencia Seguridad Alimentaria desde el punto de vista de la empresa privada, dentro del ciclo Seguridad alimentaria y nutrición en el que participa Fundación Hefame.
José Ignacio Arranz es presidente de Foro Interalimentario, una asociación de 17 empresas sin ánimo de lucro que fue creada en torno a Mercadona, uno de los líderes de la distribución alimenticia en España y erigida alrededor de una crisis de confianza, precisamente para formar a la sociedad en materia de seguridad e informarla permanentemente. “Hace algunos años, de hecho, los ciudadanos tomaron la decisión unilateral de dejar de comprar algunos productos con mala prensa. De esa situación surgió Foro Alimentario y, además, la necesidad de mejorar la comunicación sobre el riesgo alimentario a través de un Libro Blanco de la Unión Europea”, cuenta Arranz.
Ayer, con la participación de Fundación Hefame, este licenciado en Veterinaria distinguido con la A de Albéitar con categoría de oro por el Colegio Oficial de Veterinarios de la Región de Murcia, Diplomado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Microbiología e Higiene Alimentaria y Diplomado en Salud Pública por la Escuela Nacional de Sanidad-Instituto de Salud Carlos III, ofreció la ponencia Seguridad alimentaria desde el punto de vista de la empresa privada, dentro de las conferencias sobre Seguridad Alimentaria y Nutrición que ofrecen la Real Academia de Medicina y Cirugía de Murcia y Traza Consultores.
“La preocupación de los ciudadanos rota continuamente –explica Arranz-, pasamos de estar preocupados por algo puntual como la seguridad de ciertos alimentos a, por ejemplo, el precio de otros, pero sin olvidarnos del todo de lo primero; y después pasamos a preocuparnos por aspectos del control animal, pero sin olvidarnos del todo de lo anterior. De forma que siempre estamos preocupados por algo. De ahí la necesidad de reglarlo todo y velar por nuestra seguridad alimentaria. Ahora bien, el único que puede colocar alimentos seguros en los mercados es el industrial de la alimentación. Las administraciones, en este caso, deberían ser como las matronas, estar cerca por si pasa algo, vigilar. Pero hay que romper con el paradigma de la administración sanitaria policial”.
José Ignacio Arranz es presidente de Foro Interalimentario, una asociación de 17 empresas sin ánimo de lucro que fue creada en torno a Mercadona, uno de los líderes de la distribución alimenticia en España y erigida alrededor de una crisis de confianza, precisamente para formar a la sociedad en materia de seguridad e informarla permanentemente. “Hace algunos años, de hecho, los ciudadanos tomaron la decisión unilateral de dejar de comprar algunos productos con mala prensa. De esa situación surgió Foro Alimentario y, además, la necesidad de mejorar la comunicación sobre el riesgo alimentario a través de un Libro Blanco de la Unión Europea”, cuenta Arranz.
Ayer, con la participación de Fundación Hefame, este licenciado en Veterinaria distinguido con la A de Albéitar con categoría de oro por el Colegio Oficial de Veterinarios de la Región de Murcia, Diplomado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Microbiología e Higiene Alimentaria y Diplomado en Salud Pública por la Escuela Nacional de Sanidad-Instituto de Salud Carlos III, ofreció la ponencia Seguridad alimentaria desde el punto de vista de la empresa privada, dentro de las conferencias sobre Seguridad Alimentaria y Nutrición que ofrecen la Real Academia de Medicina y Cirugía de Murcia y Traza Consultores.
“La preocupación de los ciudadanos rota continuamente –explica Arranz-, pasamos de estar preocupados por algo puntual como la seguridad de ciertos alimentos a, por ejemplo, el precio de otros, pero sin olvidarnos del todo de lo primero; y después pasamos a preocuparnos por aspectos del control animal, pero sin olvidarnos del todo de lo anterior. De forma que siempre estamos preocupados por algo. De ahí la necesidad de reglarlo todo y velar por nuestra seguridad alimentaria. Ahora bien, el único que puede colocar alimentos seguros en los mercados es el industrial de la alimentación. Las administraciones, en este caso, deberían ser como las matronas, estar cerca por si pasa algo, vigilar. Pero hay que romper con el paradigma de la administración sanitaria policial”.
EL 65% DE LOS ESPAÑOLES CON FIBRILACIÓN AURICULAR PRESENTA UN ALTO RIESGO DE PADECER UN ICTUS
La fibrilación auricular (FA) es la arritmia sostenida más frecuente en la población (un 4% de la población adulta española según datos recientes de la Sociedad Española de Cardiología). Sin embargo, no se conoce bien la situación de los españoles que presentan este trastorno del ritmo cardiaco e importante factor de riesgo de ictus, particularmente en el ámbito de Atención Primaria (AP). Algunas de estas lagunas, pretende cubrirlas el estudio FIATE (FIbrilación auricular en ATEnción Primaria) que, entre otras conclusiones, revela que en nuestro país el 65% de los pacientes con FA presenta un alto riesgo de ictus, si bien la mayoría de ellos está recibiendo un tratamiento anticoagulante oral (Sintrom® en la mayoría de los casos), aunque el número de pacientes bien controlados dista de ser óptimo. Los datos de este estudio realizado por el Grupo Cardiovascular de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) se han presentado en la I Reunión Conjunta semFYC-SEC. IV Congreso Clínico Cardiovascular. Organizada por la semFYC y la Sociedad Española de Cardiología (SEC), la reunión congrega hasta mañana más de 500 profesionales médicos en el Auditorio de la Diputación de Alicante para debatir la detección y manejo de las enfermedades cardiovasculares
Como señala el doctor José Mª Lobos, coordinador del Grupo de Trabajo de Enfermedades Cardiovasculares de la semFYC, apenas se ha estudiado la atención a esta afección cardiaca en AP y mucho menos teniendo en cuenta las diferencias entre Comunidades Autónomas. “Ahora sabemos que el riesgo de ictus en estos pacientes es alto y que la mayoría reciben tratamiento con el fin de prevenir ictus u otra embolia sistémica”, explica. “Si bien, el control del nivel de anticoagulación es bastante mejorable, sobre todo cuando analizamos un periodo de tiempo algo más largo. Los pacientes que mantienen en el mundo real –las condiciones del estudio- un control estable al menos tres meses, son sólo el 33%. Quizás sean estos los datos más llamativos: estamos utilizando terapia antitrombótica en la mayoría, pero de forma subóptima, con la subsiguiente pérdida de efectividad en la prevención del tromboembolismo, y al contrario, asumiendo un riesgo aumentado de sangrado. Si nos centramos sólo en el último control, como se hacía en estudios más antiguos, este está en rango (INR 2-3) hasta en el 66% de los pacientes, en línea con otros estudios publicados previamente”, sostiene este experto.
Se calcula que cada médico de familia atiende habitualmente entre 30 y 40 pacientes con esta arritmia cardiaca, cuyo control y seguimiento es esencial. Para ello es preciso conocer bien al paciente, qué factores asociados presenta, si está recibiendo el tratamiento adecuado, así como qué puede hacerse para detectar de forma precoz a las personas en riesgo. “Uno de los principales retos al que nos enfrentamos es el enorme aumento de su incidencia y prevalencia debido al envejecimiento de la población y al aumento de sus factores determinantes como la obesidad o la diabetes. De hecho, las estimaciones indican que el número de casos aumentará un 30% en la próxima década”, augura el doctor José Carlos del Castillo, investigador principal del Estudio y coordinador del Grupo de Riesgo Cardiovascular de la Sociedad Canaria de Medicina de Familia.
-Perfil del paciente con FA y diagnóstico
El estudio FIATE ha analizado la situación de un total de 2.070 pacientes, con una media de edad de 74 años. Los resultados dibujan un perfil de paciente con FA permanente o crónica (77%), que tiene hipertensión (>70%) y diabetes (27%). El 10% había sufrido un ictus previo. También se observó que afecta por igual a hombres y mujeres, que la mayoría vive acompañados (84.5%), un 14% vivían solos y menos del 1% en residencias o centros sociosanitarios. “Merece la pena destacar”, señala el doctor Lobos, “que en España el soporte familiar que reciben estos pacientes es muy importante y algo que nos diferencia con respecto a otros países europeos”.
Según el trabajo presentado en Alicante, uno de cada cuatro pacientes no manifestó síntomas al principio. De hecho, el doctor Lobos aclara que el diagnóstico de la FA se suele hacer frecuentemente de manera casual. “Suele detectase cuando el médico o la enfermera toman la tensión arterial o auscultan y perciben un pulso irregular, por un electrocardiograma anormal, sin síntomas o son muy escasos. En algunos casos, se identifica el problema porque el paciente sufre una insuficiencia cardiaca, palpitaciones rápidas, angina o síncope, o incluso un ictus como primera manifestación clínica. Aquí, la prevención ya ha llegado tarde”, refiere el doctor Lobos.
Poner freno a esta situación y evitar que el pronóstico se cumpla pasa necesariamente por actuar preventivamente, es decir, sobre los principales factores de riesgo, optimizando el control de la hipertensión arterial y detener la actual epidemia de sobrepeso, obesidad y diabetes tipo 2. En esa labor, el papel del médico de familia puede ser esencial. “A parte de tener un protagonismo clave en el seguimiento y tratamiento en coordinación con el cardiólogo, el profesional de primaria es quien está en mejores condiciones de prevenir y reconocer el problema de forma temprana”, comenta el doctor del Castillo.
El tratamiento adecuado de los pacientes diagnosticados tiene dos pilares: el control de la arritmia y la prevención del ictus mediante terapia antitrombótica. “En un 75% de los casos el control del tratamiento anticoagulante se realiza en Atención Primaria, incluyendo su inicio en ocasiones, y sobre todo a través de controles mensuales para titular la dosis del fármaco y prevenir complicaciones. Aunque debe realizarse siempre una evaluación inicial por el cardiólogo, el seguimiento se realiza en el primer nivel asistencial, con un promedio de más de 10 visitas al año (superior para los anticoagulados). Adicionalmente hay que tratar los síntomas y controlar la frecuencia cardiaca. Es preciso conocer bien el uso clínico de ciertos fármacos como los betabloqueantes, calcioantagonistas o la digoxina”, explica el doctor Lobos.
Alto riesgo tromboembólico
Un aspecto clave en el abordaje de estos pacientes es el riesgo que presentan de sufrir un evento tromboembólico, que según el estudio es ligeramente mayor en mujeres que en hombres. La mayoría (81%) recibía tratamiento con fármacos anticoagulantes, casi todos con acenocumarol (Sintrom®). No obstante, se están produciendo cambios significativos en la terapia anticoagulante para la prevención del ictus en la FA y este es, en palabras del doctor Lobos, “un hecho sin precedentes en más de 50 años. Los nuevos anticoagulantes orales, como el reciente dabigatrán, permitirán que más pacientes puedan acceder al tratamiento por su menor variabilidad, efecto predecible para una misma dosis, menos interacciones y complicaciones, sin la necesidad de monitorización del INR. Sin embargo, aquí los médicos de familia y enfermería tenemos un papel clave para asegurar la mejor adherencia y el seguimiento, que debe seguir siendo muy estrecho. No debemos perder de vista que siguen siendo pacientes anticoagulados”, subraya este experto.
-Conociendo mejor al paciente con fibrilación auricular
El análisis de los resultados del estudio FIATE va a permitir asimismo cuantificar el tiempo que el manejo de la fibrilación auricular demanda, ya que suele generar una carga de trabajo considerable requiriendo al personal de medicina y enfermería visitar al paciente al menos una vez al mes. “Aunque estos datos se están aún valorando en el Registro, la atención y seguimiento de los pacientes anticoagulados implica una importante carga de trabajo para los profesionales de AP, siendo consultas además a las que se les dedica bastante tiempo”, asegura el doctor Lobos.
Actualmente se estima que un 80% de los pacientes con FA presentan una enfermedad cardiaca o no cardiaca de base. Lo más frecuente es que detrás de esta complicación estén la hipertensión arterial, la cardiopatía isquémica o las valvulopatías, aunque no deben olvidarse otros factores como los trastornos tiroideos o la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica); incluso se puede decir que en uno de cada cinco casos no se encuentra un agente causal. La FA es además una causa frecuente de ingreso hospitalario, morbilidad y mortalidad, y que supone una importante labor asistencial, por sí misma, por su impacto sobre la calidad de vida del paciente y por sus complicaciones.
Como señala el doctor José Mª Lobos, coordinador del Grupo de Trabajo de Enfermedades Cardiovasculares de la semFYC, apenas se ha estudiado la atención a esta afección cardiaca en AP y mucho menos teniendo en cuenta las diferencias entre Comunidades Autónomas. “Ahora sabemos que el riesgo de ictus en estos pacientes es alto y que la mayoría reciben tratamiento con el fin de prevenir ictus u otra embolia sistémica”, explica. “Si bien, el control del nivel de anticoagulación es bastante mejorable, sobre todo cuando analizamos un periodo de tiempo algo más largo. Los pacientes que mantienen en el mundo real –las condiciones del estudio- un control estable al menos tres meses, son sólo el 33%. Quizás sean estos los datos más llamativos: estamos utilizando terapia antitrombótica en la mayoría, pero de forma subóptima, con la subsiguiente pérdida de efectividad en la prevención del tromboembolismo, y al contrario, asumiendo un riesgo aumentado de sangrado. Si nos centramos sólo en el último control, como se hacía en estudios más antiguos, este está en rango (INR 2-3) hasta en el 66% de los pacientes, en línea con otros estudios publicados previamente”, sostiene este experto.
Se calcula que cada médico de familia atiende habitualmente entre 30 y 40 pacientes con esta arritmia cardiaca, cuyo control y seguimiento es esencial. Para ello es preciso conocer bien al paciente, qué factores asociados presenta, si está recibiendo el tratamiento adecuado, así como qué puede hacerse para detectar de forma precoz a las personas en riesgo. “Uno de los principales retos al que nos enfrentamos es el enorme aumento de su incidencia y prevalencia debido al envejecimiento de la población y al aumento de sus factores determinantes como la obesidad o la diabetes. De hecho, las estimaciones indican que el número de casos aumentará un 30% en la próxima década”, augura el doctor José Carlos del Castillo, investigador principal del Estudio y coordinador del Grupo de Riesgo Cardiovascular de la Sociedad Canaria de Medicina de Familia.
-Perfil del paciente con FA y diagnóstico
El estudio FIATE ha analizado la situación de un total de 2.070 pacientes, con una media de edad de 74 años. Los resultados dibujan un perfil de paciente con FA permanente o crónica (77%), que tiene hipertensión (>70%) y diabetes (27%). El 10% había sufrido un ictus previo. También se observó que afecta por igual a hombres y mujeres, que la mayoría vive acompañados (84.5%), un 14% vivían solos y menos del 1% en residencias o centros sociosanitarios. “Merece la pena destacar”, señala el doctor Lobos, “que en España el soporte familiar que reciben estos pacientes es muy importante y algo que nos diferencia con respecto a otros países europeos”.
Según el trabajo presentado en Alicante, uno de cada cuatro pacientes no manifestó síntomas al principio. De hecho, el doctor Lobos aclara que el diagnóstico de la FA se suele hacer frecuentemente de manera casual. “Suele detectase cuando el médico o la enfermera toman la tensión arterial o auscultan y perciben un pulso irregular, por un electrocardiograma anormal, sin síntomas o son muy escasos. En algunos casos, se identifica el problema porque el paciente sufre una insuficiencia cardiaca, palpitaciones rápidas, angina o síncope, o incluso un ictus como primera manifestación clínica. Aquí, la prevención ya ha llegado tarde”, refiere el doctor Lobos.
Poner freno a esta situación y evitar que el pronóstico se cumpla pasa necesariamente por actuar preventivamente, es decir, sobre los principales factores de riesgo, optimizando el control de la hipertensión arterial y detener la actual epidemia de sobrepeso, obesidad y diabetes tipo 2. En esa labor, el papel del médico de familia puede ser esencial. “A parte de tener un protagonismo clave en el seguimiento y tratamiento en coordinación con el cardiólogo, el profesional de primaria es quien está en mejores condiciones de prevenir y reconocer el problema de forma temprana”, comenta el doctor del Castillo.
El tratamiento adecuado de los pacientes diagnosticados tiene dos pilares: el control de la arritmia y la prevención del ictus mediante terapia antitrombótica. “En un 75% de los casos el control del tratamiento anticoagulante se realiza en Atención Primaria, incluyendo su inicio en ocasiones, y sobre todo a través de controles mensuales para titular la dosis del fármaco y prevenir complicaciones. Aunque debe realizarse siempre una evaluación inicial por el cardiólogo, el seguimiento se realiza en el primer nivel asistencial, con un promedio de más de 10 visitas al año (superior para los anticoagulados). Adicionalmente hay que tratar los síntomas y controlar la frecuencia cardiaca. Es preciso conocer bien el uso clínico de ciertos fármacos como los betabloqueantes, calcioantagonistas o la digoxina”, explica el doctor Lobos.
Alto riesgo tromboembólico
Un aspecto clave en el abordaje de estos pacientes es el riesgo que presentan de sufrir un evento tromboembólico, que según el estudio es ligeramente mayor en mujeres que en hombres. La mayoría (81%) recibía tratamiento con fármacos anticoagulantes, casi todos con acenocumarol (Sintrom®). No obstante, se están produciendo cambios significativos en la terapia anticoagulante para la prevención del ictus en la FA y este es, en palabras del doctor Lobos, “un hecho sin precedentes en más de 50 años. Los nuevos anticoagulantes orales, como el reciente dabigatrán, permitirán que más pacientes puedan acceder al tratamiento por su menor variabilidad, efecto predecible para una misma dosis, menos interacciones y complicaciones, sin la necesidad de monitorización del INR. Sin embargo, aquí los médicos de familia y enfermería tenemos un papel clave para asegurar la mejor adherencia y el seguimiento, que debe seguir siendo muy estrecho. No debemos perder de vista que siguen siendo pacientes anticoagulados”, subraya este experto.
-Conociendo mejor al paciente con fibrilación auricular
El análisis de los resultados del estudio FIATE va a permitir asimismo cuantificar el tiempo que el manejo de la fibrilación auricular demanda, ya que suele generar una carga de trabajo considerable requiriendo al personal de medicina y enfermería visitar al paciente al menos una vez al mes. “Aunque estos datos se están aún valorando en el Registro, la atención y seguimiento de los pacientes anticoagulados implica una importante carga de trabajo para los profesionales de AP, siendo consultas además a las que se les dedica bastante tiempo”, asegura el doctor Lobos.
Actualmente se estima que un 80% de los pacientes con FA presentan una enfermedad cardiaca o no cardiaca de base. Lo más frecuente es que detrás de esta complicación estén la hipertensión arterial, la cardiopatía isquémica o las valvulopatías, aunque no deben olvidarse otros factores como los trastornos tiroideos o la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica); incluso se puede decir que en uno de cada cinco casos no se encuentra un agente causal. La FA es además una causa frecuente de ingreso hospitalario, morbilidad y mortalidad, y que supone una importante labor asistencial, por sí misma, por su impacto sobre la calidad de vida del paciente y por sus complicaciones.
Expertos aconsejan una aplicación precoz de plerixafor (Mozobil®) para evitar gastos innecesarios e incomodidades en los pacientes
“Entre un 5 y un 10% de los pacientes con mieloma múltiple, y más del 20% de los que padecen un linfoma, no consiguen movilizar suficientes células hematopoyéticas para el trasplante de médula ósea con los métodos estándar”, según explica el doctor Rafael Duarte, hematólogo del Hospital Duran i Reynals, de Barcelona, y moderador del simposio “Bloqueo del CXCR4: consideraciones prácticas para la movilización y el transplante”, patrocinado por Genzyme y enmarcado en la LIII Reunión Nacional de la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH) y el XXVII Congreso Nacional de la Sociedad Española de Trombosis y Hemostasia (SETH). El CXCR4 es un receptor de quimiocinas, una familia muy extensa de moléculas de superficie que regulan el movimiento de las células hematopoyéticas y del sistema linfoide dentro del cuerpo humano.
Por regla general, los pacientes que presentan dificultades para movilizar sus células “tienen afectada la médula ósea como consecuencia de su enfermedad y, además de eso, reciben muchas líneas de tratamiento con quimioterapias de distintos tipos que suelen ser tóxicas y dañar también a las células no tumorales”, explica el experto. El receptor CXCR4 se bloquea con fármacos antagonistas, como plerixafor, “con la intención de que las células madre hematopoyéticas salgan de manera muy rápida a la sangre periférica”, añade.
En el simposio se han presentado nuevos resultados sobre el estudio europeo de uso compasivo de plerixafor, coordinado por el doctor Duarte, y que cuenta con más de 700 pacientes de 14 países de Europa, prácticamente la mitad del total de personas que se trataron con este fármaco en el continente, durante el programa de uso compasivo. “Los datos nos permiten confirmar en la serie más larga disponible la gran eficacia del plerixafor para rescatar al 75% de los pacientes que no consiguen recoger progenitores para el trasplante con los métodos convencionales. Además, nos ha permitido mirar a subtipos de pacientes con particularidades concretas que ningún centro o país podría ser capaz de dilucidar de manera independiente”, apunta el doctor Duarte. El CD34+ es “hoy por hoy es el principal marcador que identifica de manera estandarizada las células progenitoras hematopoyéticas en todo el mundo, con el objetivo de hacer comparables los resultados obtenidos en diferentes países”, comenta el experto. “El mínimo necesario para evitar riesgos en el trasplante es de dos millones de células CD34+ por kilo de peso del receptor, y hay numerosos datos que sugieren la existencia de una diana ideal de células en torno a los 4 ó 5 millones”, añade el doctor Duarte. Igualmente, “se aconseja una aplicación precoz de plerixafor, en pacientes malos movilizadores, para evitar duplicar esfuerzos que conllevan gastos innecesarios e incomodidades en los pacientes”.
Por regla general, los pacientes que presentan dificultades para movilizar sus células “tienen afectada la médula ósea como consecuencia de su enfermedad y, además de eso, reciben muchas líneas de tratamiento con quimioterapias de distintos tipos que suelen ser tóxicas y dañar también a las células no tumorales”, explica el experto. El receptor CXCR4 se bloquea con fármacos antagonistas, como plerixafor, “con la intención de que las células madre hematopoyéticas salgan de manera muy rápida a la sangre periférica”, añade.
En el simposio se han presentado nuevos resultados sobre el estudio europeo de uso compasivo de plerixafor, coordinado por el doctor Duarte, y que cuenta con más de 700 pacientes de 14 países de Europa, prácticamente la mitad del total de personas que se trataron con este fármaco en el continente, durante el programa de uso compasivo. “Los datos nos permiten confirmar en la serie más larga disponible la gran eficacia del plerixafor para rescatar al 75% de los pacientes que no consiguen recoger progenitores para el trasplante con los métodos convencionales. Además, nos ha permitido mirar a subtipos de pacientes con particularidades concretas que ningún centro o país podría ser capaz de dilucidar de manera independiente”, apunta el doctor Duarte. El CD34+ es “hoy por hoy es el principal marcador que identifica de manera estandarizada las células progenitoras hematopoyéticas en todo el mundo, con el objetivo de hacer comparables los resultados obtenidos en diferentes países”, comenta el experto. “El mínimo necesario para evitar riesgos en el trasplante es de dos millones de células CD34+ por kilo de peso del receptor, y hay numerosos datos que sugieren la existencia de una diana ideal de células en torno a los 4 ó 5 millones”, añade el doctor Duarte. Igualmente, “se aconseja una aplicación precoz de plerixafor, en pacientes malos movilizadores, para evitar duplicar esfuerzos que conllevan gastos innecesarios e incomodidades en los pacientes”.
La electrocardiografía es la técnica más económica y fiable en la deteccion de enfermedades cardiovasculares
Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de mortalidad en España y representan el 40% del índice total de mortalidad. El electrocardiograma es, hasta la fecha, la técnica más económica y fiable para detectar la gran mayoría de cardiopatías. Es altamente eficaz y sin duda es la técnica más utilizada para detectar infartos, arritmias y cualquier otra cardiopatía.
Con la finalidad de debatir sobre las últimas investigaciones en enfermedades cardiovasculares, el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau y ESTEVE han celebrado durante el 28 y 29 de noviembre el 50º Curso de Electrocardiografía, dirigido por el Dr. Antoni Bayés de Luna.
Según el Dr. Antoni Bayés de Luna, Profesor Emérito de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y Director Honorario del Servicio de Cardiología de Sant Pau, “el registro de la prueba es el mismo desde hace 100 años, aunque ahora se le saca más provecho; antes sólo servía para diagnosticar si había infarto y ahora sirve para tomar decisiones que influyen en la realización de pruebas muy costosas; por ejemplo, con 1€ que es el coste de un electrocardiograma podemos decidir si gastamos o no 30.000€ en un marcapasos para resincronizar un corazón”.
Dentro de las enfermedades cardiovasculares, la más frecuente es la cardiopatía isquémica, es decir, la angina de pecho y los infartos de miocardio. La angina de pecho provoca una falta de irrigación del corazón, sin muerte de tejido, mientras que el infarto se manifiesta cuando esta falta de irrigación provoca una oclusión de la arteria y la muerte de una zona del corazón. Otras enfermedades cardiovasculares son las arritmias, todos los tipos de bloqueos, las miocardiopatías, las valvulopatías, etc.
“El electrocardiograma sigue siendo la técnica gold standard para diagnosticar la gran mayoría de las enfermedades cardiovasculares más frecuentes en la población española. Es la mejor técnica y no se prevé que en el futuro haya otra técnica mejor“, comenta el Dr. Bayés.
-Genética y estilo de vida, los dos condicionantes de las enfermedades cardiovasculares
Las enfermedades cardiovasculares no afectan a todos los individuos por igual, existen algunas diferencias por edad o sexo. Así, mientras es excepcional sufrir un infarto antes de los 30 años, son más frecuentes los casos a partir de los 55 años.
Respecto a las diferencias entre hombres y mujeres, el Dr. Bayés indica que “las mujeres están genéticamente protegidas de las enfermedades cardiovasculares hasta la menopausia por factores hormonales, sin embargo, el estrés de la actividad laboral actual y hábitos de consumo como el tabaco y la alimentación están haciendo que se igualen estas diferencias de sexo.”
-Conclusiones del Curso en Electrocardiografía
El Curso de Electrocardiografía organizado por ESTEVE y el Hospital de la Santa Creu y Sant Pau cumple 50 años. En el transcurso de las cincuenta ediciones anteriores, han pasado más de 10.000 alumnos de diferentes nacionalidades. Esto ha hecho que el curso se convierta en una referencia mundial en electrocardiografía.
Este año, durante los dos días previos al curso, algunos de los más prestigiosos expertos en Cardiología se han reunido en Barcelona para debatir los últimos avances en la investigación y mejoras en la detección de enfermedades cardiovasculares a través de los parámetros de diagnóstico del electrocardiograma.
Además, el Dr. Bayés ha presentado la última revisión de su libro “Electrocardiografía clínica”.
-El Síndrome de Brugada
Otro de los temas abordados en los “workshops” que han precedido el curso es el Síndrome de Brugada, patología genética hereditaria que puede causar la muerte súbita inesperada en personas aparentemente sanas.
Según el Dr. Bayés, los atletas tienen un corazón más grande de lo normal a causa del ejercicio físico, que aumenta el tamaño del músculo. Esta particularidad puede llegar a confundirse en un electrocardiograma con el Síndrome de Brugada.
Los expertos insisten en que aunque el electrocardiograma es una técnica de diagnóstico altamente eficaz, un electro normal no es garantía de salud absoluta y uno anormal no es garantía de una enfermedad grave.
Con la finalidad de debatir sobre las últimas investigaciones en enfermedades cardiovasculares, el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau y ESTEVE han celebrado durante el 28 y 29 de noviembre el 50º Curso de Electrocardiografía, dirigido por el Dr. Antoni Bayés de Luna.
Según el Dr. Antoni Bayés de Luna, Profesor Emérito de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y Director Honorario del Servicio de Cardiología de Sant Pau, “el registro de la prueba es el mismo desde hace 100 años, aunque ahora se le saca más provecho; antes sólo servía para diagnosticar si había infarto y ahora sirve para tomar decisiones que influyen en la realización de pruebas muy costosas; por ejemplo, con 1€ que es el coste de un electrocardiograma podemos decidir si gastamos o no 30.000€ en un marcapasos para resincronizar un corazón”.
Dentro de las enfermedades cardiovasculares, la más frecuente es la cardiopatía isquémica, es decir, la angina de pecho y los infartos de miocardio. La angina de pecho provoca una falta de irrigación del corazón, sin muerte de tejido, mientras que el infarto se manifiesta cuando esta falta de irrigación provoca una oclusión de la arteria y la muerte de una zona del corazón. Otras enfermedades cardiovasculares son las arritmias, todos los tipos de bloqueos, las miocardiopatías, las valvulopatías, etc.
“El electrocardiograma sigue siendo la técnica gold standard para diagnosticar la gran mayoría de las enfermedades cardiovasculares más frecuentes en la población española. Es la mejor técnica y no se prevé que en el futuro haya otra técnica mejor“, comenta el Dr. Bayés.
-Genética y estilo de vida, los dos condicionantes de las enfermedades cardiovasculares
Las enfermedades cardiovasculares no afectan a todos los individuos por igual, existen algunas diferencias por edad o sexo. Así, mientras es excepcional sufrir un infarto antes de los 30 años, son más frecuentes los casos a partir de los 55 años.
Respecto a las diferencias entre hombres y mujeres, el Dr. Bayés indica que “las mujeres están genéticamente protegidas de las enfermedades cardiovasculares hasta la menopausia por factores hormonales, sin embargo, el estrés de la actividad laboral actual y hábitos de consumo como el tabaco y la alimentación están haciendo que se igualen estas diferencias de sexo.”
-Conclusiones del Curso en Electrocardiografía
El Curso de Electrocardiografía organizado por ESTEVE y el Hospital de la Santa Creu y Sant Pau cumple 50 años. En el transcurso de las cincuenta ediciones anteriores, han pasado más de 10.000 alumnos de diferentes nacionalidades. Esto ha hecho que el curso se convierta en una referencia mundial en electrocardiografía.
Este año, durante los dos días previos al curso, algunos de los más prestigiosos expertos en Cardiología se han reunido en Barcelona para debatir los últimos avances en la investigación y mejoras en la detección de enfermedades cardiovasculares a través de los parámetros de diagnóstico del electrocardiograma.
Además, el Dr. Bayés ha presentado la última revisión de su libro “Electrocardiografía clínica”.
-El Síndrome de Brugada
Otro de los temas abordados en los “workshops” que han precedido el curso es el Síndrome de Brugada, patología genética hereditaria que puede causar la muerte súbita inesperada en personas aparentemente sanas.
Según el Dr. Bayés, los atletas tienen un corazón más grande de lo normal a causa del ejercicio físico, que aumenta el tamaño del músculo. Esta particularidad puede llegar a confundirse en un electrocardiograma con el Síndrome de Brugada.
Los expertos insisten en que aunque el electrocardiograma es una técnica de diagnóstico altamente eficaz, un electro normal no es garantía de salud absoluta y uno anormal no es garantía de una enfermedad grave.
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