Traductor

06 October 2011

Catalunya concentra la mitad de los centros de élite científica de España

Catalunya, como apuntó hace unos días la ministra Cristina Garmendia, «es, de lejos, la primera comunidad en investigación científica». Y lo ratifican los hechos: la primera edición del programa Severo Ochoa, promovido por su departamento para primar la calidad de la investigación en España mediante una inyección económica millonaria, reconoció ayer a cuatro centros de Catalunya entre los primeros ocho de España. Cada uno de ellos recibirá un millón de euros anuales durante cuatro años -es decir, un total de cuatro millones-, al margen de su financiación ordinaria, para que puedan dar un salto de calidad en sus ya punteras investigaciones.
Los cuatro centros catalanes que entran a formar parte de la élite oficial son el Barcelona Supercomputing Center (BSC), el Institut de Ciències Fotòniques (Icfo), el Institut de Recerca Biomèdica (IRB) y la Barcelona Graduate School of Economics (GSE). Les acompañan tres centros en Madrid -CNIO (cáncer), CNIC (enfermedades cardiovasculares) y el Instituto de Ciencias Matemáticas del CSIC- y uno en Canarias (Instituto de Astrofísica, IAC). La evaluación la han llevado a cabo tres comités compuestos por 12 científicos internacionales de prestigio encabezados por tres premios Nobel. Solo Francia, Alemania y el Reino Unido tienen programas similares.
Al margen de la dotación económica, los seleccionados con el sello Severo Ochoa también podrán solicitar personal adicional en otros subprogramas y disfrutarán de un distintivo inequívoco que aspira a atraer el mecenazgo privado. El programa concederá en los próximos cuatro años un tope de 10 acreditaciones anuales hasta formar un máximo de 40 centros o unidades, según explicaron fuentes del departamento de Garmendia. Al término de los cuatro años, los centros que quieran continuar en el programa tendrán que competir de nuevo.
«Ya tocaba hacer algo así. Si eres bueno y tienes buenos resultados, es lógico que se te apoye para mejorar aún más», considera Joan Guinovart (IRB). Es el fin del café para todos. Con este dinero, los centros más rentables dan un salto cualitativo. «La gente ha de pensar que es tan importante mantener la investigación como la sanidad o la renta mínima -advierte Guinovart-. Si no se actúa así, cuando acabe la crisis internacional no estaremos en disposición de volver a crear empleo». El problema, claro está, es que solo han entrado ocho centros: «Esperamos que el programa se mantenga en los próximos años para poder distinguir a centros muy buenos que se lo merecían también», reiteraron Mateo Valero (BSC) y Lluís Torner (Icfo), en alusión a institutos como el Centro de Regulación Genómica de Barcelona, uno de los grandes ausentes.
El respaldo será muy importante económicamente, sobre todo en tiempos de recorte, y también «para llegar a más gente» en el caso de centros menos conocidos, como el Instituto de Ciencias Matemáticas del CSIC. «Te da un distintivo que te coloca entre lo mejor del país. Permitirá una financiación adicional, contratar más investigadores y poner en marcha programas que si no hubiera sido imposible. Es lo mejor que podía pasar a un centro nuevo como el nuestro, con solo un millón de euros de presupuesto», comentó su director, Manuel de León.
«El reconocimiento indica que vamos por el buen camino -consideró desde Nueva York el cardiólogo Valentín Fuster, director general del CINC-. Supone una inyección económica que nos permitirá poner en marcha un proyecto multidisciplinar, único en el mundo, para el desarrollo y aplicación de nuevos proyectos de imagen no invasiva en investigación y tratamiento de enfermedades cardiovasculares, que evitará el sufrimiento de sus consecuencias devastadoras y un enorme coste económico». Fuster se mostró convencido de que este programa tendrá mucha visibilidad y aumentará el interés de los investigadores por trabajar en el CNIC, «lo que permitirá proseguir con la incorporación de personal de excelencia». Lo importante es crear redes que eleven la calidad de la investigación española», remachó.
El director del IAC, Francisco Sánchez, confió en que el reconocimiento sea «un poco como un paraguas» para proteger la investigación, en un momento en el que, comentó, no está definido el presupuesto de su centro ni garantizado que sigan en funcionamiento instalaciones como el Gran Telescopio Canarias. «El premio ayuda económicamente pero también da un caché para obtener fondos», agregó Sánchez.

**Publicado en "EL PERIODICO DE CATALUNYA"

No comments:

Post a Comment

CONTACTO · Aviso Legal · Política de Privacidad · Política de Cookies

Copyright © Noticia de Salud