La provincia de Málaga esconde unos rincones de enorme belleza entre sus ciudades y pueblos. Un encanto natural que embruja a todo aquel que los visita. El Mar Mediterráneo que baña estas tierras es uno de los reclamos más importantes pero, sin duda, no hay que limitarse a disfrutar de esta zona solo con las vistas al mar pues el interior alberga lugares capaces de embrujar hasta al más escéptico. Prepara tus cinco sentidos porque te presentamos los diez municipios malagueños de interior que no puedes perderte.
1. Frigiliana
La Axarquía malagueña es característica por el encanto de sus pueblos y la exquisitez de su gastronomía. Aquí se encuentra Frigiliana, claro ejemplo de pueblo de casitas blancas que conserva sus raíces musulmanas. Caminar por sus calles es como sumergirse en los antiguos zocos de Al- Andalus. Esta localidad guarda un estrecho vínculo con la Granada de Boabdil y muchos de sus rincones lo recuerdan. Es muy común encontrar maceteros colgados en las fachadas con geranios, típica planta andaluza. La miel de caña es el producto estrella del lugar pues alberga la única fábrica existente aún en Europa.
2. Ronda
Este municipio es uno de los más bellos de la provincia. Es internacionalmente conocido su famoso “Tajo”, barrera geográfica que sirvió en años pasados como defensa natural para los habitantes de este paraje. Ronda es una cuna para el turismo cultural pues posee una riqueza patrimonial enorme. Si te acercas puedes visitar las murallas y puertas islámicas, la plaza de toros, el palacio del Marqués de Salvatierra o la cueva de la Pileta, entre otros tantos monumentos. La tradición taurina rondeña hace que una de sus fiestas “la corrida Goyesca” sea una de las más destacadas y originales dentro del ámbito de los toros.
3. El Borge
Este pequeño pueblo de la Axarquía malagueña forma parte de la conocida “Ruta de la pasa”. Los viñedos envuelven un paisaje natural que conjuga todo tipo de verdes con la entrañable imagen de los “paseros” (secaderos de la uva). El Borge conserva su origen musulmán de estrechas callejuelas empinadas y fue en su mezquita donde años más tarde los Reyes Católicos levantaron la iglesia de Nuestra Señora del Rosario. El templo conserva la torre morisca de Al- Borg, que más tarde sería el origen del nombre a esta población y una visita obligada. Si vas a El Borge tienes que probar su producto estrella, la pasa, y disfrutar de un paseo tranquilo por sus calles con encanto, el parque de la Alcua y del calor de su gente.
4. Mijas
Es uno de los lugares más pintorescos de la provincia. Aunque su término municipal es amplio y tiene una parte costera, es en la sierra, en Mijas Pueblo, donde reside el encanto principal de este municipio. Conocido internacionalmente por sus “Burro Taxis”, Mijas posee unas vistas inmejorables al Mar Mediterráneo. De estética típica andaluza de blancas casas y macetas floridas en las fachadas supone un placer a los sentidos pasear por sus calles. Si vienes a este lugar no dejes pasar la Muralla, el entorno de la plaza de toros o el mirador donde se encuentra la Virgen de la Peña. Como curiosidad es muy interesante visitar el “Carromato de Max”, museo de miniaturas donde podrás disfrutar de auténticas obras de arte realizadas en una lenteja, un grano de arroz o la cabeza de un alfiler.
5. Antequera
Si quieres ver un pueblo de extremada belleza acércate a Antequera. La riqueza natural, artística y patrimonial de este municipio la sitúan como uno de los lugares más bellos del corazón de Andalucía. Podemos hacer un recorrido desde la prehistoria hasta nuestros días tan solo observando monumentos de la ciudad. Los dólmenes, colegiatas, iglesias, conventos y casas señoriales adornan un entorno urbano privilegiado. Cada rincón de Antequera es una foto para el recuerdo. Pero no solo se trata del pueblo en sí, dentro de su término municipal se encuentra uno de los parajes naturales kársticos más importantes de España: El Torcal. No pases de alto Antequera si viajas a la provincia de Málaga. Disfruta de sus calles y su arte y, sobre todo, no dejes de darle un capricho al paladar. Prueba el típico mollete, “la porra” antequerana y los dulces de convento.
6. Casares
Si visitas la provincia de Málaga no te puedes perder Casares. Sus empinadas cuestas en desnivel y sus casitas blancas hacen de él un “pueblo colgante” de los más bonitos del interior. Conocido también como la cuna de “Blas Infante”, padre de la patria andaluza, Casares está coronado por un castillo medieval que ofrece vistas de todos los pueblecitos de alrededor. Si pasas por estas tierras tienes que pararte a probar uno de sus platos típicos la “sopa casareña”, además del conejo a la montaña.
7. Casarabonela
Este pueblo ha logrado conjugar su pasado musulmán y cristiano como ningún otro. Aún conserva partes de la antigua Casr Bonaira (antiguo nombre de Casarabonela) y su herencia árabe se hace patente en sus estrechas callejuelas empinadas. Los pasajes más interesantes de su historia están reflejados en los azulejos pintados en cerámica local que adornan plazas y rincones. Si visitas este pueblo puedes también apreciar el jardín andalusí situado al pie de la fortaleza árabe y el Museo de Arte Sacro.
8. Archidona
No puedes perderte si viajas a la provincia de Málaga un lugar tan emblemático como es Archidona. Su famosa Plaza Ochavada supone un referente dentro del arte barroco andaluz y es el símbolo del municipio. Parecido a un antiguo corral de comedias es hoy en día el lugar donde se celebran la mayoría de los eventos municipales. Este pueblo malagueño cuenta con una lista nutrida de iglesias y edificios religiosos que se combinan con plazas típicas andaluzas, yacimientos arqueológicos y unas vistas inmejorables a la vega de la comarca antequerana.
9. Teba
Si eres un amante de la historia no dudes en pasarte por Teba. Casitas blancas y palacetes señoriales se rinden a los pies del castillo árabe y la iglesia barroca del siglo XVIII. Pero uno de los motivos por los que destaca este pueblo es por sus yacimientos donde se pueden apreciar exponentes de asentamientos íberos, romanos y andalusíes. Es muy importante también la artesanía del lugar basada en los trabajos de esparto y los bordados. Si vas a Teba puedes también hacer deportes como el remo, piragüismo, espeleología, escalada y vuelo libre.
10. Álora
En el interior de la provincia de Málaga se enclava este pueblecito de blancas casas típico andaluz rodeado, precisamente, del árbol autóctono de esta región, el olivo. Pero si algo hay que destacar de este lugar es uno de los parajes naturales más importantes de la provincia: El Chorro. Esta zona privilegiada de la naturaleza se encuentra a 12 kilómetros del casco urbano siendo el Desfiladero de los Gaitanes el punto más importante. Esta garganta rocosa de más de 100 metros de altitud posee una de las vistas más espectaculares que pueden contemplarse en la provincia. Si viajas a Málaga no puedes pasar por alto este lugar.
Rincones pintorescos, parajes naturales, riqueza patrimonial y gastronomía tradicional son algunas de las muchas razones que tienes para pasarte por la provincia de Málaga. Sus pueblos de interior conservan el embrujo típico de Andalucía y son capaces de enamorar a cualquiera. Una mezcla de sensaciones que merece la pena experimentar.
Rincones pintorescos, parajes naturales, riqueza patrimonial y gastronomía tradicional son algunas de las muchas razones que tienes para pasarte por la provincia de Málaga. Sus pueblos de interior conservan el embrujo típico de Andalucía y son capaces de enamorar a cualquiera. Una mezcla de sensaciones que merece la pena experimentar.
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