La Esclerosis
Múltiple (EM) afecta en España a unas 46.000 personas. “Cada año se
diagnostican en España 1.800 pacientes nuevos con Esclerosis Múltiple, siendo la
enfermedad neurodegenerativa más frecuente entre los 20 a 40 años y la segunda
causa de discapacidad en jóvenes en los países desarrollados”, ha apuntado el
Dr. Bonaventura Casanova, coordinador de la Unidad Mixta de Esclerosis Múltiple
y Neurodegeneración del Instituto Sanitario La Fe de Valencia, durante la rueda
de prensa con motivo de la LXVI Reunión Anual de la Sociedad Española de
Neurología (SEN), que cuenta con el apoyo de TEVA Neuroscience.
En
nuestro país, los casos de Esclerosis Múltiple se han multiplicado por 2,5 en
los últimos 20 años, de los que al menos el 70% son mujeres. Se trata de una
patología compleja e impredecible, que no afecta por igual a cada paciente.
Pérdida de visión, alteraciones de la sensibilidad, debilidad en los miembros,
falta de coordinación y temblores son los síntomas más comunes, que aparecen de
forma brusca -lo que se denominan brotes- y duran varios días o incluso meses.
Como
no es una patología conocida, surgen falsos mitos, como que es una enfermedad
que se hereda, que es contagiosa, que es muy poco frecuente entre la población
general, que el embarazo está contraindicado o que las personas que la padecen
acaban con un grado severo de discapacidad y en silla de ruedas.
“Ahora
sabemos que con un diagnóstico precoz
podremos realizar un tratamiento temprano que prevenga la discapacidad, lo que
va a mejorar el pronóstico de la enfermedad a medio y largo plazo”, ha
asegurado el neurólogo, quien ha concretado que “los fármacos son más efectivos
si tratamos al paciente en una fase temprana de la enfermedad”.
La Resonancia Magnética
(RM), fundamental para el diagnóstico precoz
En este
sentido, el Dr. Óscar Fernández, especialista del Instituto de Neurociencias
Clínicas del Hospital Regional Universitario Carlos Haya de Málaga, ha
recordado que la resonancia magnética (RM) es una herramienta fundamental para
el diagnóstico precoz. “Es uno de los biomarcadores más útiles de los que
disponemos en la actualidad, tanto para establecer el diagnóstico como para
predecir la conversión a EM, e incluso pronosticar la discapacidad en los años
siguientes, comprobar la evolución del paciente y la respuesta al tratamiento”,
ha explicado el Dr. Fernández, quien ha insistido que “un paciente que ha
tenido un primer episodio sugestivo de EM y cuya RM resulta anormal tiene un
90% de riesgo de padecer la enfermedad en los siguientes 14 años. Sin embargo,
si la RM es normal y la clínica es lo suficientemente característica, el riesgo
es de un 20%”.
Hay que
tener en cuenta que en el 40% de los pacientes con EM se puede realizar el
diagnóstico en fases iniciales de la enfermedad, “por lo que el tratamiento
debe ser inmediato y sin esperas, para poder cambiar el curso de la enfermedad.
Por eso, debemos plantearnos tratar incluso la fase preclínica, es decir,
cuando en un paciente -al que se ha realizado una RM por otro motivo- se
observan lesiones típicas de la EM. Esto es lo que se conoce como síndrome
radiológico aislado”, ha concretado el Dr. Fernández.
Próxima aprobación de acetato de
glatiramero 40 mg tres veces por semana
Por su
parte, el Dr. Rafael Arroyo, coordinador de la Unidad de Esclerosis Múltiple
del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, ha explicado que el acetato de glatiramero
es un tratamiento de primera elección para los pacientes con EM. “Dicho tratamiento ha demostrado en
todos los ensayos clínicos que reduce significativamente la tasa de brotes y la
progresión de la discapacidad, teniendo en cuenta los estudios monitorizados y
prospectivos realizados durante cerca de 20 años, donde se reafirma su eficacia
y seguridad”. Además, se sabe que la
fatiga afecta casi al 80% de los pacientes y es el síntoma más incapacitante y
una de las causas más frecuentes de abandono de la vida laboral. A este
respecto, se han publicado nuevos estudios que muestran que los pacientes con
Esclerosis Múltiple tratados durante dos años con acetato de glatiramero
reducen sus niveles de fatiga y mejoran su calidad de vida.
Otro avance destacado
será la próxima aprobación en Europa y en España –ya disponible en Estados
Unidos- de acetato de glatiramero 40 mg tres veces por semana para los
pacientes con EM tratados con acetato de glatiramero, ya que podrán pasar
de las actuales siete inyecciones subcutáneas a la semana (una diaria de 20mg)
a un tratamiento con tres inyecciones semanales (cada una de 40mg), con la
misma eficacia, seguridad y tolerabilidad. “Los pacientes con EM tendrán la
opción de un tratamiento efectivo y seguro, reduciendo el número de inyecciones
un 60%”, ha especificado el neurólogo del Hospital Clínico San Carlos de
Madrid.
A pesar de su eficacia y seguridad, los
tratamientos inyectables pueden producir reacciones locales como eritema y
dolor en el punto de inyección que, aunque leves, pueden llevar al paciente a
desarrollar una actitud negativa ante el tratamiento, sobre todo en fases tempranas
del mismo. “El dolor referido por el
paciente tras administrarse el fármaco puede llegar a traducirse en una pérdida
de adherencia, con la consiguiente pérdida de eficacia o incluso un abandono
temprano del tratamiento”, ha concretado Concepción Ramírez, enfermera
de Esclerosis Múltiple del Hospital Clínico San Carlos de Madrid.
Para solucionarlo, Concepción Ramírez ha explicado
que si se
disminuye la profundidad de inyección, adaptándola al pliegue cutáneo del
paciente en cada una de las zonas de inyección, se reduce ese dolor a valores
leves o moderados, tal y como se desprende del Proyecto de Mejora de la
Práctica Clínica Asistencial. “Los resultados apuntan que las profundidades a
utilizar son 4 mm y 6 mm, en la mayoría de los casos”, ha concluido la
enfermera de Esclerosis Múltiple.
No comments:
Post a Comment